La declaración final de la Cumbre de Jefes de Estado y de Gobierno de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (Celac), que terminó el miércoles, trajo polémica ya que, por diferentes motivos, Argentina, Paraguay y Nicaragua rechazaron que se haya aprobado pese a que no hubo consenso de los miembros.

El ruido de esa polémica tuvo su eco en nuestro país. El diputado blanco Juan Martín Rodríguez expresó a través de su cuenta de X que el gobierno uruguayo desconoció “el consenso exigido por la Celac para aprobar sus declaraciones”. “Reclamaremos respuestas al gobierno, a través de la cancillería, haciendo honor al buen nombre de nuestro país en ámbitos donde los populismos totalitarios no pueden imponerse a las reglas democráticas”, agregó.

En diálogo con la diaria, Rodríguez dijo que cuando el canciller, Mario Lubetkin, estuvo en la Comisión de Asuntos Internacionales de la Cámara de Diputados, que él preside, hace menos de dos semanas, “más allá de algunos matices, sobre todo con el tema de la actitud con Venezuela”, su exposición le había parecido “satisfactoria, en cuanto a la línea que iba a seguir la política internacional de nuestro país”. “Pero resulta que, una semana más tarde, todo lo que nos dijo a los legisladores se tiró por la ventana”, acotó.

El diputado sostuvo que cuando la Celac se expresa a través de declaraciones, “lo que se exige es el consenso”, pero eso no significa “el consenso de algunos, muchos o la mayoría, sino de todos”. “De lo contrario, como muchas veces ocurre, se terminan sacando puntos de las declaraciones o se apela a declaraciones que a primera vista podrían ser más lavadas o más suaves para arribar a ese consenso tan exigido”, señaló.

Rodríguez explicó que se refiere al documento “Procedimientos para el funcionamiento orgánico de la Celac”, que en su página siete, en el punto relativo a las decisiones, establece que ellas “se adoptan por consenso en todas las instancias”, y luego se agrega: “Las decisiones se reflejan por escrito y pueden tomar el formato de declaraciones, decisiones, comunicados conjuntos y especiales resoluciones o cualquier otro instrumento de decisión que de común acuerdo se determine. Todas tienen el carácter de acuerdos políticos y constituyen mandatos”.

Así las cosas, el diputado subrayó que al momento de tomar la resolución y aprobarla “no se reunió ese consenso, porque ni Argentina ni Paraguay estaban de acuerdo”, por lo tanto, “Uruguay no pudo haber hecho caso omiso a que había dos socios del Mercosur que no estaban de acuerdo”. “Tendría que haber dicho que estaban de acuerdo, pero que con dos opiniones contrarias no se lleva el consenso, no se puede aprobar”, sostuvo. Aclaró que se refiere a “un tema formal” y que no va a opinar sobre el tema de fondo, es decir, a los motivos de las diferencias.

Rodríguez dijo que “Uruguay no puede sumarse al movimiento barrabrava de los socialistas del siglo XXI” y decir “como acá las mayorías estamos de acuerdo, se aprobó”. “Eso no corre. Y se lo vamos a preguntar al canciller, porque no nos puede mentir a los legisladores”, insistió.

El diputado dijo que citar al canciller al Parlamento “no tiene sentido en este momento”, por eso irá por la vía del pedido de informes. Agregó que ya este lunes irá al Palacio Legislativo y presentará la solicitud. “Espero que haya algún funcionario para aceptarla”, finalizó, en referencia a que en Semana de Turismo el Parlamento no tiene actividad.

Por su parte, el canciller Lubetkin, en entrevista con la agencia Efe, fue consultado sobre las diferencias de Argentina, Paraguay y Nicaragua con la declaración final. Contestó que ese punto “es un punto pequeñito de una reunión grande”. “Empecemos por la reunión grande: había 12 presidentes, primeros ministros o vicepresidentes y 18 ministros, viceministros de relaciones exteriores. Esa es la importancia de la reunión”, dijo. Agregó que si en la reunión de la Celac hay un debate, “incluso apasionado, hasta enfrentado”, eso es América Latina y el Caribe. “¿Nos vamos a poner a inventar una región que no existe?”, preguntó.

El canciller dijo que “lo que pone en discusión eso es una metodología de trabajo”, por lo tanto, “quizás no haya que hacer más documentos” y sólo “haya que hacer acuerdos sobre temas puntuales”. “No sé, habrá que reflexionar. Lo que está claro es que todos tienen que estar cómodos dentro de la Celac”, finalizó.