En Flores, con el 100% de los votos escrutados, el Partido Nacional (PN) retuvo la intendencia y obtuvo el 71,9% de los votos, imponiéndose sobre el Frente Amplio (FA) y el Partido Colorado (PC), que obtuvieron 16,9% y 5,8%, respectivamente.

En la interna del PN, Diego Irazábal fue el candidato más votado con 42,2% de los votos, y se convirtió en intendente electo. El triunfo de Irazábal dejó por el camino al exministro de Defensa Nacional y exintendente del departamento Armando Castaingdebat, con 29%.

Dentro del FA, Nazario Pedreira obtuvo 9,1% y María Bidegain 7,5%, y en la interna del PC Claudio Aguilar obtuvo 4% y Diego Martínez 1,4%.

Tras su triunfo, Irazábal conversó con la prensa y expresó que haber sido electo es “un sentimiento de responsabilidad y compromiso”. “Yo no estoy acá porque entendí que la política era una actividad que tenía ganas de hacer, [sino que] lo tomé como una profesión, lo tomé muy en serio, es una responsabilidad enorme”, manifestó.

Consultado sobre cómo será el vínculo del gobierno departamental con otros partidos políticos, el intendente electo aseguró que el diálogo será “construido en función de métodos de trabajo”. “Yo quiero ser metódico, quiero tener una planificación, quiero que en esa planificación y esos métodos la visión y aportes de los demás partidos estén presentes y reflejados, eso seguro”, subrayó. Agregó, además, que no conoce otra manera de trabajar “que no sea en diálogo con todos los partidos”.

Destacó que la ciudadanía le “ha dado la confianza para liderar procesos, dirigir el departamento para ser el intendente”, pero que eso “no significa” que le hayan dado “la posesión de la intendencia en cuanto a aparato político” para que “haga con ella” lo que quiera.

“Nosotros queremos que esto despegue, desde el punto de vista de inversiones, de la estructura económica, de la generación de puestos de trabajo, que haya un crecimiento palpable, rápido, y ese crecimiento que sea crecimiento con igualdad”, auguró de cara a la gestión.