Estos indicios –a falta de otros– señalan intenciones de desandar los caminos de cooperación interinstitucional ya recorridos con éxito para esta situación urbana.
El trumpismo, que aumentó la represión, la desinformación, el verticalismo y el racismo, en tiempos electorales seguirá siendo un modelo a seguir para llegar al poder para los populistas de extrema derecha.
La votación refleja la irrupción de un movimiento electoral que en términos de participación y de sus preferencias sustantivas impugna al establishment
El MAS, una vez más, aprovechó su estructura orgánica y las prácticas que le dieron su primer triunfo electoral en 2005: una campaña de puerta a puerta y multitudinarios mitines.
Las propuestas regulatorias del actual gobierno en materia laboral y especialmente en lo relativo a la huelga y sus modalidades parecen remitirnos lentamente a la década del 90.
El fin último de la autocrítica es el cambio, la rectificación. Si no cambiamos, no defenderemos lo conquistado, no defenderemos la democracia y no volveremos.
¿Es válido que se intente regular la forma de hablar de una comunidad porque desde la perspectiva de un legislador se trata de formas “incorrectas” que no deberían usarse?
Los grupos racistas, clasistas, colonialistas fueron derrotados por un movimiento popular que ya no soporta la humillación y el desprecio de unos pocos que se creen superiores.