Después de que el fiscal de Corte, Jorge Díaz, anunciara a principios de mes la creación de la Fiscalía de Lesa Humanidad con el objetivo de que “el Estado tenga especialización en la materia y una única estrategia de persecución de estos crímenes”, ayer asumió su titularidad Ricardo Perciballe, quien será acompañado en el nuevo cargo por un equipo integrado por dos fiscales: una adjunta y una adscripta.
La Fiscalía Especializada en Derechos Humanos abarcará los casos desde 1969, previo al golpe de Estado cívico-militar. En diálogo con Radio Uruguay, el fiscal anunció que tendrá potestad sobre tres tipos de causas: los “más atrasados”, que son los presumarios en etapa investigativa y que comprenden “el cúmulo mayor”; aquellos que ya cuentan con una sentencia interlocutoria, es decir, que se dispuso un procesamiento sobre las personas implicadas; y por último, aquellos en los que ya se condenó y se está en la etapa de ejecución. “Todos serán previstos dentro del marco de la Fiscalía”, que será “de alcance nacional” y comprenderá “todas las causas que existen en el país” afirmó.
Tras 20 años de experiencia en lo penal y desempeñándose como fiscal en Crimen Organizado, Perciballe fue trasladado en 2012 a la órbita civil por el fiscal de Corte, quien dijo en ese momento que obedecía a “razones de servicio”, a raíz de la “necesaria” rotación de fiscales en cargos de alta complejidad. Sobre principios de 2016, Perciballe fue trasladado nuevamente hacía la Fiscalía de Hacienda y Aduanas, y a mediados de julio volvió a la Fiscalía Penal. En ambos casos recurrió, considerando los movimientos “injustos” y “deméritos”.
El nombramiento del fiscal es apoyado por la organización Crysol, asociación que nuclea a ex presos políticos en Uruguay. Perciballe ha manifestado en dictámenes judiciales su postura de considerar las violaciones de derechos humanos en dictadura como de lesa humanidad, y, por lo tanto, imprescriptibles. “Por la naturaleza de estos delitos es importante que los Estados den una respuesta adecuada. No sólo para las víctimas sino para toda la sociedad. Por eso se habla de delitos de lesa humanidad, porque no sólo ofenden a la propia víctima, sino que ofenden a toda la sociedad. Por eso la imprescriptibilidad de los mismos”, afirmó Perciballe en una entrevista con Caras y Caretas.