La llegada del coronavirus a Uruguay ha cambiado el funcionamiento del país y de la sociedad, y por eso la Corte Electoral ya dejó en claro que no puede garantizar el “normal desarrollo” de las elecciones departamentales del 10 de mayo. El problema ahora es el mecanismo. En los tres partidos más grandes hay distintas visiones acerca de qué formula debe implementarse para postergar la elección, y eso se pondrá arriba de la mesa el lunes, durante un encuentro que encabezará la vicepresidenta, Beatriz Argimón, con autoridades de todas las colectividades políticas.

El sector más grande del Frente Amplio, el Movimiento de Participación Popular (MPP), tiene bajo la manga un proyecto de ley interpretativo de la Constitución que establece que el artículo 44 de la Carta Magna –que afirma que “el Estado legislará en todas las cuestiones relacionadas con la salud e higiene públicas, procurando el perfeccionamiento físico, moral y social de todos los habitantes del país”– prima en esta ocasión sobre el numeral 9° del artículo 77, que determina la fecha exacta de las elecciones departamentales: el segundo domingo de mayo, cada cinco años. ¿Cuál es la justificación? El decreto aprobado por el presidente, Luis Lacalle Pou, el viernes pasado, en el que declara la “emergencia sanitaria” del país, con base en la pandemia mundial de Covid-19 provocada por el coronavirus.

Esa tesitura fue planteada por el abogado constitucionalista y profesor de Derecho Constitucional de la Universidad Católica Martín Risso, que dijo el miércoles en una entrevista con Radio Carve que “no es cierto que no se puede interpretar por ley la Constitución”. Risso recordó que en estos contextos, el artículo 44 debe primar sobre el numeral 9º del artículo 77.

En una línea similar viene trabajando el senador nacionalista Jorge Gandini. El proyecto interpretativo del legislador incluye también los artículos 7 y 38 de la Constitución, según dijo él mismo a la diaria el miércoles: “La Constitución no dice que no se pueda cambiar la fecha de las elecciones, ahí hay un vacío. Les pone fecha a los comicios, pero en el artículo 7 también se habla del derecho del goce de la vida, en el 44 dice que el Estado legislará en materia de salud, y el 38 le da valor a la ley [que se estaría votando]”. Este último artículo, explicó, garantiza el “derecho de reunión pacífica y sin armas”, que “no podrá ser desconocido por ninguna autoridad de la República sino en virtud de una ley” y únicamente cuando “se oponga a la salud, la seguridad y el orden público”. Para el senador, como el acto eleccionario “requiere del derecho de reunión, naturalmente la gente se reúne antes y durante la elección, y eso es justamente lo que no podemos permitir ahora, para cuidar la expansión del virus”.

Pero en el nacionalismo la postura tampoco es unánime. El diputado Nicolás Olivera, quien se postula a la Intendencia de Paysandú, dijo a la diaria que es necesario que existan “elementos científicos a la vista para tomar una decisión”, ya que el aplazamiento de las elecciones no es un tema para “talentear”. “Hay que tener otros elementos más que la simple intuición de que esto va para largo”, sostuvo el legislador, que además dijo que si bien “desde el punto de vista constitucional le están buscando la vuelta”, a él no lo convencen las alternativas que se plantean. “El tema es cómo suspenderlas y para cuándo, y eso tiene que depender de un criterio científico, más allá de que sea una decisión política”, expresó.

Las “vueltas jurídicas” del tema son una de las cosas que están complicando la interna del Partido Colorado. Así, el diputado Ope Pasquet explicó en su cuenta de Twitter que no comparte la tesis que manejan Gandini y el MPP, con base en una opinión del abogado Martín Risso: “Una cosa es interpretar la Constitución; otra distinta es modificarla”, dijo el legislador, que entiende que “si cambiamos la fecha de las elecciones estamos modificando la Constitución, no interpretándola”, lo que “sentaría un precedente peligroso”. Para el legislador, la alternativa posible es una propuesta del también catedrático de derecho constitucional (de la Universidad de la República) y ex senador colorado Ruben Correa Freitas, que sostiene que habría que sancionar una “ley constitucional” que “postergue las elecciones para octubre o noviembre, y plebiscitar la ley conjuntamente con las elecciones”.

Sus comentarios le valieron las críticas del diputado frenteamplista Alejandro Sánchez (MPP): “Estamos frente a un problema complejo, requiere responsabilidad, sentido común y apego a la institucionalidad. Realizar las elecciones el 10 de mayo, afectaría 3 derechos fundamentales: celebración de elecciones libres, derecho al sufragio y el cuidado de la salud”, le respondió.

En cambio, otro diputado de su mismo sector político, Felipe Schipani (que también pertenece a Ciudadanos, liderado por Ernesto Talvi), argumentó ser partidario de aplicar lo que sugiere Risso y dijo que “no parece razonable” que se convoque a elecciones.

Para entreverar aun más las cosas, el ex intendente de Rivera y senador suplente del Partido Colorado Tabaré Viera –una de las figuras más cercanas al ex presidente Julio María Sanguinetti– sostuvo que es inconstitucional aplazar las elecciones, y propuso como medida paliativa establecer que no sean obligatorias.

En medio de la discusión, tampoco Cabildo Abierto tiene definida una postura institucional. El diputado Álvaro Perrone dijo a la diaria que dentro del partido se está conversando al respecto, porque “la Constitución es bastante rígida en el tema”. El legislador fue parte de la reunión del martes en la que la Corte Electoral informó de los problemas que tendría para organizar los comicios, y dijo que según lo que escuchó “las complejidades son importantes”.

En cambio, el Partido Independiente es más afín a que se realice una ley constitucional, según dijo a la diaria su único diputado, Iván Posada. “Se puede hacer una elección con mucho menos mesas de votación y sin voto obligatorio, promoviendo una participación de mucho menos gente”, expresó. Sobre lo que sostiene Risso respecto del artículo 44, dijo que no le ve “un encuadre como para poder interpretar algo desde allí”.