A lo largo de su obra dramática, el clásico Antón Chéjov se dedicó a alternar el humor y el sarcasmo al retratar una escena de un día cualquiera. En general, la acción es mínima y se desarrolla en diálogos cotidianos, aparentemente insignificantes, pero que sorprenden por su poder de síntesis y evocación. Uno de sus clásicos, como es El jardín de los cerezos, cierra con una frase que define a muchos de sus personajes: “Mi vida pasó y yo no he vivido nada”.
Los sábados a las 21.00 y los domingos a las 20.00 el Teatro Circular presenta Tío Vania, otro de sus recordados textos, en el que cuenta la historia de seis personajes atrapados en una vida infeliz de la que no pueden escapar, y por eso mismo, culpan al resto. En el camino seguirán ilusionados con poder revertirlo algún día, y por eso llegarán a admitir: “Todo lo que podría haber hecho y no hice”.
Se trata de una obra en la que se cruza el drama y la comedia a través de un sinfín de emociones que evidencian el absurdo y lo tragicómico de la vida: “Un amor no correspondido, un matrimonio sin amor, un cambio de fortuna que nunca llega, la mediocridad de lo banal y del exitismo. Todos muestran con indolencia sus contradicciones en busca de la felicidad”.
Con dirección de María Varela, el elenco de Tío Vania está integrado por Hugo Bardallo, Jorge Bolani, Claudio Castro, Alma Claudio, Laura de los Santos, Soledad Gilmet, Xabier Lasarte y Norma Salvo.