Jorge Drexler termina mañana su seguidilla de tres noches consecutivas de conciertos con entradas agotadas en el Teatro Solís, como parte de una gira que luego lo llevará por Argentina, Brasil, Chile, Colombia, Estados Unidos, España y México. Salvavidas de hielo, su último disco –publicado la semana pasada–, fue grabado entre Ciudad de México y Madrid, utilizando únicamente las posibilidades que brindan la voz y la guitarra. La percusión fue grabada mediante loops (fragmentos de música sincronizados para repetirse, que dan la sensación de continuidad), ensamblados a través de las cuerdas de guitarras y sus cajas de resonancia, la piel de un banjo y el metal de un dobro (una guitarra con resonador que generalmente es usada en el blues). El disco cuenta con la colaboración de tres artistas que aportan algunos de los momentos altos del álbum: las mexicanas Julieta Venegas (en el candombe “Abracadabras”) y Natalia Lafourcade (en el tema que le da nombre al disco, una serenata con espíritu mexicano que cierra el álbum), y la chilena Mon Laferte en “Asilo” (un hermoso bolero que por momentos roza el vals). Los asistentes de las tres funciones en el Teatro Solís podrán ver cómo su último trabajo toma vida sobre el escenario en un recital íntimo que también incluirá a sus composiciones anteriores.