Nuestro protagonista es el teniente comandante James Reece (Chris Pratt), un impávido Navy SEAL capaz de las mayores hazañas al frente de su equipo, acaso el prototipo de héroe invencible al que nos tiene acostumbrados cierto tipo de televisión. Pero ya en el piloto de The Terminal List (dirigido con mucho brío por Antoine Fuqua, quien marca el tono de la serie entera) todo sale muy mal para Reece y sus hombres en una operación en Medio Oriente que, se supone, estaba planeada hasta el último detalle y rebosaba preparación.

Casi todo el pelotón ha muerto. ¿Quién se equivocó? ¿La inteligencia militar que apresuró el operativo? ¿O fue un error del propio Reece, quien, traumatizado por lo ocurrido, no logra discernir realidad de ficción entre aquello que recuerda? ¿O acaso había una segunda agenda que tenía por objetivo eliminar a estos soldados?

Así, con un protagonista que no tiene todos los patitos en fila pero bien que sabe apilar a todos los muñecos que le pongan delante, comienza este thriller de acción basado en la serie de novelas del autor Jack Carr, que abreva directamente de referentes claros y evidentes –la saga Bourne, el primero– para entregar una historia simple, sencilla y bastante efectiva.

La mirada de la serie es antes autocrítica que patriotera, aunque no le falta nacionalismo. A la usanza de las mejores temporadas de 24, la mítica serie de acción en tiempo real, la verdad deriva en una de venganza, con nuestro héroe reconociendo que tiene pocos aliados y aunque quizá esté algo tocado por lo sucedido, algo muy gordo está pasando y él se encuentra en el centro mismo del huracán.

Poco se puede agregar sin entrar a destripar los diferentes giros y vueltas de tuerca (algunos interesantes, otros tan evidentes que se ven desde el capítulo uno). Hay que aprovechar a Chris Pratt en un protagónico atípico, sin un ápice del humor que lo caracteriza y sí muy físico, al borde de la monotonía.

Es en sus momentos más sencillos y directos –hay un homenaje directo a Rambo: First Blood– cuando la serie más se disfruta. Un elenco variado (Constance Wu, Taylor Kitsch, Riley Keough, Jeanne Tripplehorn, Nick Chinlund, Jai Courtney, Sean Gunn y Marco Rodríguez, entre otros) encarna secundarios y villanos.

Sin inventar la pólvora ni cambiar para nada las reglas de juego, The Terminal List es entretenimiento competente y efectivo que deja la puerta abierta para más entregas, lo que no es sorpresa dado que Carr lleva ya media docena de novelas publicadas sobre el personaje. El propio escritor es todo un personaje: desde su página web, llena de alabanzas al militarismo, se presenta como “Thriller Author: Former Navy SEAL”. Poco más se informa sobre el creador de James Reece, quien parece producir un tipo de literatura que funciona muy bien dentro de un nicho que debería ampliarse tras esta serie de Amazon, supongo yo, aunque el producto final –y el propio sitio web, en verdad– no lleve a nadie corriendo a buscar las novelas.

The Terminal List. Ocho episodios de una hora aproximadamente. En Prime Video.