El partido con más historia del campeonato uruguayo es la estrella del fin de semana. Primero, porque así se rotula un clásico, siempre un sitial por encima del resto. Segundo, más referido a la actualidad, porque Nacional y Peñarol llegan cabeza a cabeza a la definición del primer torneo del año y, como faltan dos fechas para el cierre, lo que suceda este domingo puede ser determinante. A las 16.00 y a estadio Centenario lleno, hay clásico.

La situación es así: Nacional lidera la tabla con 31 puntos y Peñarol está con 29. Pero además, los números son casi iguales en todos los ítems. Los tricolores tienen 21 goles convertidos mientas que los carboneros llevan uno más; en goles en contra Nacional sólo ha recibido 5 y Peñarol 8; ambos, además, tienen solamente un encuentro perdido en lo que va de campeonato y la diferencia radica en que los tricolores tienen 10 partidos ganados mientras que los aurinegros llevan 9.

Con los números arriba de la mesa –vale agregar que los terceros en discordia, Defensor Sporting y Danubio, tienen 24 puntos–, es fácil deducir que lo que suceda mañana definirá la suerte en la recta final. Mucho más para Nacional. Si el conjunto de Alexander Medina logra ganar sacará cinco puntos de ventaja a falta de seis por jugar. Más claro: queda en la puerta del campeonato. Ganar significa para Peñarol la oportunidad de quedar primero, uno arriba de su tradicional rival, panorama favorable a los de Leo Ramos, lógicamente, pero mucho más apretado de cara a las dos últimas fechas.

Muy lindo lo de los números, pero sin jugadores no sucede nada –o, si sucede, como mínimo estaríamos hablando de otra cosa–. Nacional llega sin actividad en la semana porque no tuvo fecha por la Copa Libertadores. El Cacique Medina parece tener el once titular, aunque no lo confirmó públicamente. Esteban Conde al arco; línea de cuatro defensiva con el argentino Gino Peruzzi, Guzmán Corujo, Diego Polenta y Jorge Fucile; en la mitad de la cancha la duda es si Matías Zunino o Santiago Romero, además de Diego Arismendi, Christian Oliva y Carlos de Pena; mientras que en la delantera jugarían Sebastián Papelito Fernández y Gonzalo Bergessio.

Leonardo Ramos la tuvo más complicada. Primero, porque sí jugó por la Libertadores entre semana con viaje incluido a Asunción. Además, estuvo esperando hasta último momento la evolución de Fabricio Formiliano y del argentino Maximiliano Rodríguez. Al final, parece que los dos llegan en buenas condiciones y van adentro: Kevin Dawson al arco; Guillermo Varela, Formiliano, Ramón Arias y Lucas Hernández; Fabián Estoyanoff, Guzmán Pereira, Cristian Rodríguez y Agustín Canobbio; Maxi Rodríguez y Gabriel Fernández.

Pero como el fútbol no sólo vive de clásicos, la pelota rodará por varias canchas. Empecemos por hoy, que habrá cuatro partidos. El primero en comenzar arrancará a las 15.00. Uno de los terceros, Danubio, recibe a Rampla Juniors en Jardines del Hipódromo. Luego, a las 16.00, el Prado tendrá un hermoso juego entre dos vecinos: Wanderers y River Plate. Este encuentro irá en el Parque Alfredo Víctor Viera. Además, a la misma hora, en el estadio Belvedere chocarán Liverpool y Racing. Por último, a las 17.15 Cerro y Torque se medirán en el Luis Tróccoli. Tanto este encuentro como el de las 15.00 serán los televisados.

El domingo habrá dos partidos además del clásico, ambos en el interior. A las 11.00, en San Carlos, Atenas, en su cancha, recibirá la visita de Fénix. Luego, a la misma hora que Peñarol-Nacional –un hecho por lo menos discutible, dada la atención que un clásico concita–, en Las Piedras Boston River será local ante Progreso.

En esta oportunidad, el que no jugará pero ganará los puntos es Defensor Sporting, que debía enfrentarse a El Tanque Sisley.