En lo que va del actual período de gobierno hubo ocho sustituciones en las 19 jefaturas de Policía designadas. Varios jerarcas fueron cesados o renunciaron por estar involucrados en investigaciones asociadas a irregularidades, delitos y corrupción.

Sobre fines del año pasado, desde el Ministerio del Interior se informó que en marzo de este año habría nuevos cambios en las jefaturas de Policía. Al respecto, el ministro del Interior, Luis Alberto Heber, dijo que en enero se iba a evaluar el desempeño de los jefes de Policía de todo el país: “Acá los jefes tienen que tener resultados”. “Para nosotros es tan importante lo que damos como lo que exigimos. Entonces, no es un tema de personas ni de afectos, sino de resultados efectivos de la lucha contra el delito. Los jefes son cargos de confianza y, en función de eso, deben ser exigidos por parte del ministro, porque si yo mañana no cumplo, tengo que salir. Lo mismo vale para todos los cargos”, expresó.

Así fue que Diego Fernández, director de la Policía Nacional, remitió a Heber un documento, con fecha del 24 de febrero y al que accedió la diaria, en el que sugiere cambios.

Las cúpulas de las jefaturas departamentales están compuestas por el jefe, el subjefe y el coordinador. Se proponen cambios en varios de estos roles en las jefaturas de Policía de Cerro Largo, Treinta y Tres, Artigas, Rivera, Durazno y Paysandú.

Cerro Largo

José Adán Olivera, jefe de Policía de Cerro Largo, fue imputado en diciembre por revelación de secreto especialmente agravado: le avisó a un policía que era investigado por hurto de leña. Además, se investiga una red de corrupción policial en el departamento. Olivera renunció a su cargo para “no involucrar al Ministerio del Interior” en irregularidades y delitos. En su lugar asumió el comisario general Ignacio González, que era subjefe de Florida, en régimen de encargatura porque no está retirado.

Para esta jefatura se propone a Marcelo Suárez como director. Suárez es el responsable de la pintada, luego del fallecimiento del exministro Jorge Larrañaga, con la leyenda “Hay orden de no aflojar” en la jefatura de la zona 5 de la Jefatura de Policía de Montevideo, de la que era director. La pintada generó cuestionamientos al Ministerio del Interior porque estaba por fuera de la ley: los policías no pueden hacer proselitismo político, e incluso Heber reconoció que “no era legal”. Cuando se consultó al Ministerio del Interior si habría sanciones, dijeron que Suárez fue “llamado a despacho” del director de la Policía Nacional. Si bien se ordenó borrar la frase porque estaba fuera de la ley, Suárez fue promovido al grado máximo de la Policía: comisario general. Estaba en el puesto 56 de 96 concursantes, pero ascendió por selección.

En enero hubo otra polémica en la Jefatura de Policía de Cerro Largo mientras el actual director, Ignacio González, estaba de licencia: rindieron honores a Ayelmiro Pereira, que estaba preso en Domingo Arena por delitos cometidos en la dictadura. Se ordenó izar el pabellón nacional a media asta en la Jefatura de Cerro Largo, donde el represor fue jefe entre 2001 y 2005. A cargo de esa jefatura estaba el comisario mayor Danubio Fábrica, que se mantuvo en su cargo de coordinador desde la gestión de Olivera y fue relacionado con el caso por el que fue imputado su exjefe. Al retornar de su licencia, González ordenó una investigación administrativa bajo su responsabilidad.

En los cambios propuestos por Fernández a Heber se sugiere remover a Fábrica y que en su lugar asuma el comisario mayor Richard Melo, que actualmente cumple funciones en esa jefatura. Se propone que Fábrica asuma el mismo rol de coordinador en la Jefatura de Policía de Treinta y Tres.

No se plantea a dónde pasará a cumplir funciones el actual jefe, Ignacio González.

Treinta y Tres

La Jefatura de Policía de Treinta y Tres también es investigada por corrupción. El actual jefe de Policía de Treinta y Tres, Gustavo Silveira, está siendo investigado por omisión ante una denuncia de corrupción policial en su Jefatura. Dos policías, que fueron sumariados, denunciaron ante Silveira que algunos policías exigían coimas para recuperar objetos robados. El sindicato policial alertó sobre “persecución laboral y sindical” por las consecuencias que tuvieron los policías que denunciaron los hechos.

Fernández plantea la remoción de Silveira como jefe y que asuma en su lugar el comisario mayor Richard Lima, actual subjefe de Policía de Rivera. Como subjefe se sugiere al comisario mayor River Aquines, actual director de coordinación administrativa en Rivera. La cúpula de la Jefatura de Policía de Treinta y Tres se completaría con Danubio Fábrica como coordinador.

Tampoco se plantea destino para Silveira, que ya está retirado.

Artigas

Alberto González, exjefe de Policía de Artigas, fue el primer cesado del gobierno, a 100 días del comienzo de la gestión, en junio de 2020. Tras una evaluación de todos los mandos policiales se tomó la resolución, y según explicaron desde el Ministerio del Interior, González no daba con el perfil adecuado y fue sustituido por Adolfo Cuello, quien en ese momento era subjefe de Policía de Salto.

En esta tanda de cambios, Cuello se mantiene como jefe. El subjefe pasa a ser el actual subjefe de Treinta y Tres, el comisario mayor Carlos Moreno. Como coordinador asume el comisario mayor Sergio Martínez, actual jefe de la zona 2 de Rivera.

Rivera

Rivera es el departamento donde más aumentaron los homicidios. Wilfredo Rodríguez, actual jefe, fue cuestionado luego de que ordenara reprimir a una pareja gay que estaba en la plaza de la capital departamental. El jefe estaba en su ventana, que da a la plaza, y dio la orden de que policías intervinieran frente a la presencia de la pareja en el lugar público. En ese momento, el director de la Policía Nacional dijo que “a veces algunas cositas se nos van de cauce”.

Rodríguez se mantiene en su cargo. Como su subjefe y su coordinador serán trasladados a Artigas, como subjefe asume el comisario mayor Homero Silva, actual coordinador, y la coordinación será asumida el comisario mayor Richard Magdaleno, actual jefe de la zona 1 de Rivera.

Durazno

En enero en Durazno hubo cuestionamientos asociados al enfrentamiento de bandas delictivas en lugares públicos. Si bien Richard Marcenal, jefe de Policía de Durazno, descartó que hubiera un enfrentamiento entre bandas cuando ocurrió el primer hecho, los sucesivos eventos lo confirmaron.

Marcenal continúa en su cargo y como subjefe asume el comisario mayor Crisoldo Caraballo, actual subdirector de la Dirección Nacional de Educación Policial en régimen de encargatura, porque no está retirado. Caraballo fue director del Instituto Nacional de Rehabilitación de 2016 a 2017. Wilson Aquino, actual subjefe, pasa a ser subdirector de la Dirección Nacional de Educación Policial.

Paysandú

En Paysandú sólo cambia el coordinador de la jefatura, qué pasa a ser el comisario mayor Juan Chanquet, actual jefe de la zona 1 en el departamento.

Dirección Nacional de Educación Policial

Washington Curbelo fue director nacional de la Educación Policial desde marzo de 2020 hasta que en junio fue cesado por el actual ministro. Curbelo fue el perito que intervino en la investigación por la muerte de la madre de Heber y contradijo a otro técnico que determinó que una mujer policía fue la autora del texto que acompañaba la botella de vino que envenenó a Cecilia Fontana, lo que hizo naufragar parte de la investigación. Curbelo fue reemplazado por el comisario mayor Efraín Abreu, hasta ese momento subdirector. Como no está retirado, fue en régimen de encargatura.

En la actual propuesta de cambios, Abreu se mantiene en su cargo y como subdirector asumiría Aquino, en un enroque con Caraballo, que asume su lugar en Durazno.

Como director de la Escuela Policial de Posgrados y Estudios Superiores asume la comisaría mayor Gilma Viana, actual jefa de la zona 1 de Montevideo. Viana fue destacada por el gobierno como “la primera mujer jefa de zona de la historia”, aunque en la Policía hubo mujeres en cargos superiores.