Marcos Morón (guionista, editor del área de Humor en la diaria)

Gomorra, de Roberto Saviano (Debolsillo, 2006). “Cualquier persona que agarre un libro sobre la mafia napolitana sospecha que se va a encontrar con altas dosis de violencia. Gomorra confirma esas sospechas y con creces, porque Saviano tiene una admirable capacidad para narrar hechos de sangre. Pero el libro es bastante más que una crónica policial muy bien escrita y documentada. En primer lugar, porque logra emocionar gracias a la visión sensible y compasiva del autor sobre las personas involucradas en la violencia mafiosa. Además de eso, Gomorra hace un análisis extenso de la interrelación entre el crimen organizado, la geopolítica y la economía global, en el que cuestiones como el neoliberalismo, el lado sucio de la industrialización y la precarización del trabajo aparecen como algunas de las causas de la incontrolable expansión de las mafias por el sur de Italia Cuando parece que Saviano se está yendo por las ramas, en realidad está haciendo un estudio exhaustivo de las raíces del árbol”.

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Manolo Nieto (cineasta; su película El empleado y el patrón es la representante de Uruguay en los Oscar)

“El último libro que leí: Yo estoy vivo y vosotros estáis muertos. Un viaje en la mente de Philip K Dick, de Emmanuel Carrère (Anagrama, 1993). A PKD me lo presentó Ricardo Henry en su librería Atlantis hace casi 30 años y me volví devoto, al punto de que es mi sueño adaptar para el cine alguna de sus novelas. Lo bueno de este libro es que trata de reconstruir lo que le pasaba por la cabeza en diferentes momentos de su vida y para eso se vale de una increíble investigación, del análisis de algunos y de –lo más interesante– la ficción que le pone el autor, que es un novelista. Este libro es lo más parecido a un biopic en el cine, pero en una buena. Te pone en la escena desde el punto de vista de Dick, lo escuchás hablar y lo escuchás pensar mientras vas al baño con él”.

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Stephanie Demirdjian (periodista, editora del área Feminismos en la diaria)

“Uno de los libros más alucinantes que leí en este último tiempo es Mi habitación, mi celda, ese tesoro histórico que tejieron Lilián Celiberti y Lucy Garrido a fines de los años 80 y que acaba de reeditar la Colección Feminista Guyunusa en alianza con Sujetos Editores. Escrito como diálogo, es el resultado de tres meses de conversación entre las dos mujeres sobre la experiencia de Celiberti a partir de su secuestro en Brasil en 1978, el traslado clandestino y la vivencia como presa política. Su testimonio es transgresor en una época en que la historia, y sobre todo la de la dictadura, era narrada por hombres. A través de su experiencia personal nos acerca a la de otras mujeres que lucharon contra la represión y tramaron estrategias específicas para resistir y sobrevivir en el encierro. La reedición del libro viene a rescatar este diálogo del olvido y a reivindicarlo como lo que es: un aporte fundamental a la memoria feminista de nuestro país”.