Vecinos que se oponen a la construcción de una pista para picadas de vehículos en el humedal del arroyo Maldonado presentarán una petición administrativa al intendente Enrique Antía para que cese “de inmediato” las obras de relleno de las antiguas piletas de oxidación ubicadas en el padrón 2572, donde se emplazará el circuito.
El escrito fue divulgado este domingo durante una reunión masiva convocada en la playa Martínez, de La Barra. Los activistas, entre los que figuran docentes e investigadores del Centro Universitario Regional Este, expusieron el daño ambiental que implica el proyecto, anunciaron algunas iniciativas y escucharon propuestas de los asistentes.
El documento resume los hechos que motivaron la movilización, detalla la importancia del ecosistema del humedal y cómo lo afectarán las intervenciones que realiza la Intendencia de Maldonado (IDM), según observaron expertos que integran las organizaciones sociales y técnicos vinculados con las ciencias ambientales y el turismo.
También ofrece un capítulo con las normas y las leyes en las que se ampara la petición. Primero menciona los artículos 7, 30, 72 y 332 de la Constitución de la República; luego citan la Ley General de Medio Ambiente y el Plan de Ordenamiento Territorial del Eje Aparicio Saravia, que declaró al padrón 2572 dentro del área natural de “protección absoluta”.
En tercer lugar, se refiere al decreto de creación del Ecoparque del Humedal de los arroyos Maldonado y San Carlos, cuyo objetivo es “preservar el ecosistema y poner en valor la biodiversidad” como marco para el desarrollo sostenible de “productos de turismo” y esparcimiento de la población.
Suspensión inmediata y apertura de “un espacio de diálogo”
En conclusión, vecinos y organizaciones piden “que se disponga la suspensión inmediata de las intervenciones” de la IDM en el padrón 2572 y que no se construya “la pista destinada a picadas de autos y motos ni ningún otro tipo de construcción que no esté contemplada en el plan de manejo del ecoparque”.
Teniendo en cuenta el “valor e interés de la pista para los solicitantes”, proponen que el proyecto se traslade a otro padrón, que cuente “con el estudio ambiental de impacto ambiental correspondiente” y que cumpla con “la regulación departamental de acuerdo a las características de esa actividad”.
Finalmente, solicitan que “se abra un espacio de diálogo con los vecinos del humedal” y que se escuche “la voz de la sociedad” que desea mantener la calidad del agua del arroyo y la calidad de las playas, que son el principal atractivo turístico del país.
Cuestionan ausencia del Ministerio de Ambiente
El jueves 30, el director general de Gestión Ambiental, Jorge Píriz, convocó a algunos medios de prensa para afirmar que los materiales de relleno de las antiguas piletas de oxidación no afectan al ecosistema del humedal. Sostuvo que los desechos, provenientes de las casas demolidas en el exasentamiento Kennedy, son previamente clasificados y que no hay elementos nocivos.
Sin embargo, el material gráfico registrado por los activistas –al que accedió la diaria– evidencia lo contrario. De esto también da cuenta la petición administrativa dirigida al intendente: “Escombros, electrodomésticos, basura, cables, metales, plásticos y residuos de diversa índole” son volcados por los camiones municipales en el humedal.
“El Ministerio de Ambiente no se ha presentado en el lugar ni ha emitido respuesta frente a las denuncias realizadas” a través de la web de la cartera, mediante llamadas telefónicas y correos electrónicos. “Los camiones y las retroexcavadoras continúan trabajando sin parar, echando tierra sobre los escombros, aplanando la zona e impactando negativamente también sobre el pastizal lindero y sobre la circulación de agua”, remarca el documento.
El texto también expone la importancia ecosistémica del humedal para atenuar los impactos de inundaciones, evitar la erosión, depurar el agua y regular el clima a escala local, entre otros servicios. Destaca, en particular, que el humedal del arroyo Maldonado presenta “características únicas en términos de biodiversidad, es proveedor de alimentos y generador de puestos de trabajo, atrae a miles de turistas, es parte de la identidad fernandina y carolina, y un ícono para la calidad del aire de la ciudad de Maldonado”.