Con un acto en la ciudad de Zipaquirá, situada a 30 kilómetros de Bogotá, el candidato izquierdista Gustavo Petro cerró este domingo su campaña previa a las elecciones presidenciales del 29 de mayo, en las que está primero en todas las encuestas.
Un día antes, durante un multitudinario evento en Barranquilla, el postulante del Pacto Histórico denunció, sin dar mayores detalles, que el “martes” habría una acción del gobierno para evitar el desarrollo de los comicios, por lo que convocó a una reunión a otros dos postulantes, al centrista Sergio Fajardo y al populista Rodolfo Hernández, de la Liga de Gobernantes Anticorrupción.
“Convoco aquí a todas las campañas en competencia, a la campaña de Sergio Fajardo, a la campaña de Rodolfo Hernández, a ponerse en alerta y a reunirse el lunes porque el martes tienen pensado darles un golpe a las elecciones del próximo domingo 29 de mayo. Tienen pensado suspender las elecciones, tienen pensado suspender los órganos que rigen el proceso electoral en Colombia”, expresó Petro, cuyas declaraciones tuvieron una rápida respuesta de parte del gobierno y de otros actores políticos.
El ministro del Interior del gobierno que encabeza Iván Duque, Daniel Palacios, escribió en su cuenta de Twitter: “Afirmaciones en las que se habla de aplazamiento o suspensión de las elecciones son absolutamente falsas. Solicitamos a candidatos y equipos no generar desinformación. Unas elecciones transparentes inician con la responsabilidad de los candidatos de no promover información falsa”.
Por su parte, uno de los candidatos mencionados por Petro, el exalcalde de Bucaramanga Rodolfo Hernández, le respondió al candidato izquierdista a través de sus redes sociales: “Gustavo: 1. El fuego no se apaga con gasolina. 2. Es irresponsable asumir hechos inexistentes como ciertos. 3. Soy víctima de gavillas y no me presto para hacerlas”.
Según informó el diario El Tiempo, aunque Petro no se refirió directamente a él, el candidato derechista Federico Gutiérrez de la coalición Equipo por Colombia también hizo alusión a las declaraciones de su rival electoral. “Petro desprecia la democracia y lo que hace es utilizar los mecanismos democráticos para hacerse elegir y una vez elegido asesinar desde adentro la democracia, y eso no se lo vamos a permitir”, respondió el candidato Gutiérrez, quien al enterarse de que Petro citó a los candidatos Rodolfo Hernández y a Sergio Fajardo para hablar sobre el tema, respondió: “Lo que queda claro es que están juntos”.
Ya el domingo Petro, en su cuenta de Twitter, volvió a hacer referencia a la presunta interferencia que según él puede haber en las elecciones.
“Estamos al borde de un zarpazo y el mundo debe ayudarnos a defender con tranquilidad la democracia y los derechos del pueblo, sin miedo, sin indecisión, sin temores, porque lo que están demostrando es que han llegado a su estado final”, escribió el líder del Pacto Histórico.
“A esas organizaciones internacionales, comisiones electorales que ya están en Colombia, los invito a reunirse permanentemente y de urgencia”, agregó.
La campaña electoral ha sido muy dura y en medio de las amenazas que los candidatos recibieron se hizo normal que Petro tuviera que hacer sus discursos públicos con un chaleco antibalas y con custodias portando enormes escudos metálicos a su lado. Lo mismo sucedió con su candidata a la vicepresidencia, Francia Márquez, que, en la noche del sábado en Bogotá, durante un acto en el que se celebraba el Día de la Afrocolombianidad, debió interrumpir su discurso porque estaba siendo apuntada con un rayo láser desde un edificio cercano al lugar donde se estaba desarrollando el evento.
Estos elementos, junto a las permanentes acusaciones cruzadas que se lanzaron los candidatos, terminaron de configurar un clima muy pesado, que además tiene una enorme incertidumbre sobre los resultados, aunque la tendencia clara es que Petro le lleva una gran ventaja a sus oponentes.
Según una encuesta difundida el viernes por el Centro Estratégico Latinoamericano de Geopolítica, Petro obtendría 48% de los votos válidos, Rodolfo Hernández 21,8%, Federico Gutiérrez 21,4% y Sergio Fajardo 5,1%. Si estos números se reflejan en las urnas, habría segunda vuelta el 19 de junio, ya que ninguno de los candidatos tendría la mitad más uno de los votos.