Los dos candidatos presidenciales que se enfrentarán en las elecciones del domingo 19, Sergio Massa, de Unión por la Patria (UP), y Javier Milei, de La Libertad Avanza (LLA), sostuvieron en la noche del domingo el único debate previo a los comicios.
La sede de la Facultad de Derecho de la Universidad de Buenos Aires fue el escenario en el que el actual ministro de Economía y candidato oficialista se trenzó en un intercambio que Massa manejó muy bien desde el comienzo, haciéndole una serie de preguntas sobre las propuestas hechas por el postulante libertario durante la campaña.
Esta dinámica se mantuvo durante casi toda la primera hora del debate, con Massa en el papel de fiscal y Milei en el de indagado. De entrada, el actual ministro, un avezado político con más de 30 años de trayectoria, descolocó y emplazó a Milei, quien tuvo que dar explicaciones sobre sus planteos acerca de la eliminación del Banco Central, de los subsidios, el proyecto de dolarización, las relaciones con Brasil y China, la educación pública, entre otros temas.
La cuestión de Malvinas, que despierta enormes sensibilidades en la sociedad argentina, también fue llevada al debate por Massa, quien cuestionó a su adversario por haber declarado su admiración por la exprimer ministra británica Margaret Thatcher y por el derecho de autodeterminación de los kelpers, los habitantes de las islas en la que se libró la guerra en 1982.
En este tema, el candidato ultraderechista trazó un muy desafortunado paralelismo, comparando su admiración por la dirigente conservadora inglesa, a la que Massa definió como una “enemiga de la Argentina”, con los goles que le hizo el neerlandés Johan Cruyff a la selección albiceleste en el Mundial de 1974.
Milei, además, se entreveró y se refirió a la selección alemana, la anfitriona del torneo, y no al equipo de los Países Bajos. “Estás cayendo en una falacia. Con ese criterio, cuando Alemania le hizo cuatro goles a Argentina y Cruyff hizo un desastre vos tendrías que considerar que es un pésimo jugador”, respondió el economista libertario.
El candidato anticasta, quien tenía mucho para ganar en el debate preguntándole al ministro de Economía en funciones sobre la situación actual que vive el país, quedó en una situación muy incómoda al no poder zafar y redirigir la discusión planteada hábilmente por el candidato oficialista.
Hubo también algunos duros cruces personales. “Vos sos un mentiroso”, que integra un “gobierno de delincuentes”, le dijo Milei a Massa. El libertario también manejó el término “ventajita” con el que sus detractores mediáticos más acérrimos nombran peyorativamente al candidato oficialista. Ante los agravios, Massa llamó a Milei a “retractarse”, cosa que su adversario no hizo.
Pero el candidato de UP también fue sumamente filoso con Milei. En un momento Massa propuso que se haga un examen psicotécnico para comprobar la salud emocional de ambos candidatos y, en ese momento, dejó deslizar que la tirria del libertario con el Banco Central deriva de su expulsión durante una pasantía que cumplió en la entidad cuando aún era estudiante.
También Massa dijo que Milei plagió varios fragmentos de los textos de economía que escribió, instando a la gente a buscar información sobre el tema en Google, recurso que el oficialista empleó en varias ocasiones a lo largo del tenso intercambio.
“Esto no es entre Macri y Cristina es entre vos o yo”, le planteó varias veces Massa a Milei, cada vez que el libertario quiso adosar al candidato oficialista con los gobiernos de los Kirchner.
También Massa dominó totalmente el manejo de los tiempos de la mayor parte del debate. En varios momentos del intercambio, Milei agotó su tiempo antes, lo que le permitió al ministro de Economía expresarse durante 20 o 25 segundos más, quedando casi siempre con la última palabra.
Donde los candidatos tuvieron más coincidencias fue en la cuestión punitiva, durante el bloque en el que se abordó el tema de la seguridad. Allí Massa se refirió a su gestión durante el período en el que fue intendente de Tigre, en el norte del Gran Buenos Aires. Milei le reconoció a su rival la gestión exitosa en dicho distrito, aunque luego le tiró con todo, recordando que, posteriormente, la esposa de Massa, Malena Galmarini, no fue electa en el lugar. “Será porque te conocen”, expresó Milei, en uno de los pocos momentos en los que prevalecieron sus dardos sobre los de su oponente.
Más adelante, un detalle insólito en un debate, luego de que Massa terminara de hablar, también dentro del bloque de seguridad, Milei, ya habituado al modelo de debate impuesto por su contrincante, le preguntó “¿cuál es la pregunta?”, a lo que el oficialista le respondió “ninguna. Te estoy cediendo la palabra”, y allí el libertario le devolvió la palabra a Massa, quien aprovechó el rebote y siguió mostrando su superioridad argumentativa.