Mientras en el norte de la Franja de Gaza los combates entre las fuerzas israelíes y los milicianos de Hamas continúan siendo muy intensos, los bombardeos prosiguen en las zonas centro y sur del enclave palestino, tanto en la ciudad de Jan Yunis como en Rafah, ubicada en el extremo sur del territorio gazatí, sobre la frontera con Egipto.

Con un número de muertos que ya ronda las 19.000 personas, los ataques israelíes están generando, además, enormes daños humanitarios, llevando a una situación extrema a la población de Gaza, en su mayoría desplazada de sus hogares y forzada a trasladarse hacia la zona sur, donde los bombardeos son frecuentes.

Intentando sumar puntos a su pésima imagen internacional, el gobierno de Benjamin Netanyahu decidió este domingo por primera vez desde que comenzó la guerra abrir el cruce fronterizo de Kerem Shalom para permitir el ingreso desde Israel de ayuda humanitaria hacia la Franja.

Por otra parte, y en el marco de su guerra con Hamas, organización que gobierna en Gaza, este domingo el ejército israelí afirmó haber descubierto hasta el momento el túnel más grande en territorio gazatí.

De acuerdo a lo que informó AFP, la construcción subterránea formaba parte de una red más amplia que se extendía por más de cuatro kilómetros y llegaba a 400 metros del cruce fronterizo de Gaza con el kibutz de Erez.

A la vez, también son cada vez más duros los combates entre los israelíes y las milicias chiitas de Hezbolá, que operan desde el sur de Líbano, la frontera norte de Israel. Esta guerra de baja intensidad va en escalada y es por ello que en las últimas horas el ministro de Defensa de Israel, Yoav Gallant, dijo que su ejército podría “copiar y pegar” la táctica que están empleando en Gaza.

Desde el punto de vista diplomático, varias fuentes expresaron que la posibilidad de una nueva tregua puede estar cerca. Un funcionario egipcio citado por la agencia Reuters informó que tanto el gobierno de Israel como Hamas están dispuestos a volver a dialogar sobre un cese al fuego, aunque sigue habiendo desacuerdos en los detalles que conllevaría este acuerdo, como por ejemplo el momento y la duración del cese parcial de las hostilidades.

En el mismo sentido, la cadena CNN informó que después de semanas sin contactos directos, el viernes el jefe del Mossad, David Barnea, se reunió con el primer ministro de Qatar, Mohammed bin Abdulrahman Al Thani, encuentro que las partes valoraron como “positivo”.

Qatar, uno de los grandes apoyos económicos de Hamas, fue clave en la negociación del primer cese al fuego que posibilitó la liberación de 105 rehenes israelíes por 240 presos palestinos, en todos los casos mujeres y menores de edad.

Paralelamente, la situación política dentro de Israel sigue siendo compleja para Netanyahu, que cada vez tiene un discurso más belicista e incluso ahora cambió de postura respecto a lo que había expresado en el comienzo del conflicto y se mostró partidario de que Israel siga controlando la Franja de Gaza una vez que se termine la guerra.

Este domingo el líder de la oposición, el centrista Yair Lapid, dijo en una entrevista con el portal de noticias Ynet que Netanyahu “ya no puede seguir siendo jefe de gobierno”, y opinó que durante la guerra se pueden celebrar elecciones anticipadas.

“Tenemos un primer ministro que perdió la confianza del pueblo, perdió la confianza del mundo y perdió la confianza del sistema de seguridad”, expresó Lapid.

La comunidad internacional, por su parte, sigue ejerciendo presión sobre Israel para que detenga sus ataques sobre Gaza, que principalmente están afectando a la gran mayoría de la población civil que habita en el lugar.

Este domingo, informó el diario inglés The Guardian, el ministro de Asuntos Exteriores de Reino Unido, David Cameron, y su homóloga alemana, Annalena Baerbock, publicaron un artículo conjunto en el que pedían un alto al fuego “sostenible”, diciendo que el objetivo debe ser llegar a un acuerdo de paz que dure “generaciones”.

En una declaración separada, pero en el mismo sentido, la ministra de Asuntos Exteriores de Francia, Catherine Colonna, pidió, durante una visita a Israel, que haya una tregua “inmediata y duradera”.

De acuerdo a lo que informaron agencias internacionales, Colonna dejó en claro que el gobierno de su país está “profundamente preocupado” por la situación en el territorio palestino y que demasiados civiles están siendo asesinados.

Otra influyente voz internacional que se expresó sobre el conflicto en las últimas horas fue el senador republicano estadounidense Lindsey Graham, quien dijo que Israel tendrá que aceptar una solución de dos estados si quiere normalizar los vínculos con las naciones árabes, incluyendo a Arabia Saudita.