Entre las miles de personas que se congregaron este sábado en Londres, Reino Unido, en torno a la ceremonia de coronación del rey Carlos III, había quienes lo hacían al grito de “¡Dios salve al Rey!” y otros, vestidos de amarillo, que protestaban: “¡No es mi rey!”.
La primera coronación desde 1953, cuando se coronó la difunta reina Isabel II.), estuvo marcada por el despliegue de un operativo de la Policía Metropolitana de Londres con el que se detuvo a unas 52 personas, entre ellas, el director ejecutivo del colectivo antimonárquico Republic, Graham Smith, según informó la BBC.
La semana pasada se aprobaron cambios en la normativa y se dispuso que los preparativos para manifestarse en bloque son ilegales, informó el medio británico. En ese marco, la Policía aseguró que había incautado “dispositivos de fijación” que podían servir a los manifestantes para sujetarse a las barandas. Según Republic, se trataba de correas que utilizaban para sostener las pancartas. El grupo antimonarquía planteó que las fuerzas de seguridad ordenaron el cese de la protesta cuando descargaban los carteles cerca de la procesión.
Hasta el momento, la Policía informó sobre la detención de 52 personas, de las cuales 32 fueron detenidas por el delito de conspiración para causar alteración del orden público y las restantes por reyerta y alteración del orden público.
De las personas detenidas, 13 pertenecen al grupo ecologista Just Stop Oil. Un portavoz del colectivo aseguró que el objetivo de la manifestación era “sólo mostrar camisetas y banderas”. “Esto es una pesadilla distópica”, lamentó. Por su parte, el colectivo Animal Rising afirmó que varios de sus integrantes habían sido detenidos a kilómetros de distancia del acto de coronación.
Yasmine Ahmed, directora de Human Rights Watch en Reino Unido, expresó: “Los informes sobre personas detenidas por protestar pacíficamente contra la coronación son increíblemente alarmantes”. Y agregó: “Esto es algo que se esperaría ver en Moscú, no en Londres”.
Por su parte, Karen Findlay, la comandante que dirigió el operativo policial, alegó que “las protestas son ilícitas y pueden ser perturbadoras”. Asimismo, defendió que “la coronación es un acontecimiento único en una generación y esa es una consideración clave en nuestra evaluación”.
Fuera de Londres no se registraron detenciones, a pesar de que hubo protestas en la ciudad de Cardiff, en Gales, y en Glasgow y Edimburgo, Escocia.