Uruguay se encuentra en un momento clave para definir los lineamientos de su política exterior bajo el marco de la nueva administración, con el propósito de fortalecer su posicionamiento en el complejo escenario global actual. El reciente encuentro entre la Comisión de Asuntos Internacionales del Senado y el ministro de Relaciones Exteriores, Mario Lubetkin, marcó un paso significativo hacia la consolidación de una política pública destinada a proteger los intereses nacionales tanto en el ámbito regional como multilateral.

El Parlamento, junto con el Poder Ejecutivo, desempeña un rol de codecisión en materia de política exterior. Además, asume funciones de contralor sobre los compromisos internacionales asumidos y la gestión administrativa de la cancillería. Durante los primeros 30 días de trabajo, el canciller destacó la creación del Gabinete Técnico Profesional como una iniciativa clave para profesionalizar el Ministerio de Relaciones Exteriores.

Entre los avances más relevantes se incluye la participación de Uruguay en procesos de integración latinoamericana y el fortalecimiento de vínculos con el Caribe. En el marco de la IX Cumbre de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (Celac) en Tegucigalpa, el presidente Orsi reafirmó el compromiso uruguayo con los principios de unidad respetando la diversidad. Este enfoque busca impulsar la colaboración en áreas esenciales como la lucha contra la pobreza, la transición energética y la protección ambiental.

Por otro lado, Uruguay está explorando nuevas oportunidades con mercados emergentes como China, India y Sudáfrica, cuya creciente clase media representa un desafío y una oportunidad para diversificar el comercio de alimentos y otros sectores estratégicos. Estas alianzas responden a los cambios en la multipolaridad internacional y al declive de la hegemonía estadounidense, en un contexto marcado por la competencia global.

La nueva política internacional se erige sobre valores fundamentales no negociables: la defensa de la democracia, los derechos humanos, el medioambiente, la paz y la seguridad internacionales. Estos principios, inherentes a la identidad nacional, representan un horizonte claro para la proyección internacional de Uruguay, consolidando una política exterior inclusiva y autónoma que prioriza el diálogo informado y transparente con todos los sectores de la sociedad.

Uruguay apuesta por construir una política de Estado sólida y consensuada, capaz de afrontar los desafíos globales y regionales, mientras reafirma su compromiso con un orden internacional más justo y equilibrado.

En el marco de la nueva política internacional, la subsecretaria de Relaciones Exteriores, Valeria Csukasi, destacó la importancia de dinamizar las relaciones bilaterales con Brasil mediante un nuevo mecanismo de consultas políticas a nivel de viceministras. Este enfoque busca superar las dificultades de coordinación que enfrentaban las reuniones de alto nivel desde 2016, permitiendo una frecuencia de encuentros más técnica y efectiva. Es un espacio intermedio que permitirá avanzar en temas como el dragado de la laguna Merín y el puente Yaguarón, fundamentales para el desarrollo fronterizo y comercial, afirmó Czukasi.

Además, la subsecretaria destacó el interés en promover mecanismos que optimicen la agenda conjunta y faciliten acuerdos en temas como el movimiento de ambulancias y seguridad en la frontera, reflejando el compromiso de ambas naciones con soluciones concretas.

En cuanto al Mercosur y la Unión Europea, Czukasi subrayó que Uruguay mantiene su posición tradicional de priorizar negociaciones conjuntas dentro del Mercosur, a la vez que avanza en temas de flexibilización y negociación con socios estratégicos en Asia. “La situación con la Unión Europea requiere la aprobación del Consejo Europeo para proceder a la firma del acuerdo, lo que representa un paso clave en la consolidación de estos lazos comerciales”, señaló.

Uruguay apuesta por construir una política de Estado sólida y consensuada, capaz de afrontar los desafíos globales y regionales, mientras reafirma su compromiso con un orden internacional más justo y equilibrado.

Con estas iniciativas, Uruguay continúa fortaleciendo su política exterior con un enfoque técnico y estratégico que responde a las necesidades actuales, promoviendo la cooperación internacional y defendiendo sus intereses en el escenario global.

El ministro de Relaciones Exteriores, Mario Lubetkin, abordó temas clave para la política internacional uruguaya, destacando avances significativos realizados por administraciones anteriores, como la solicitud de ingreso al banco del BRICS, que se encuentra en etapas finales para su aprobación en el Parlamento. “El banco del BRICS y el BRICS son entidades distintas; si bien estamos analizando nuestra participación en el banco, ingresar al BRICS no está en nuestra agenda actual”, afirmó Lubetkin. Además, resaltó el impacto del bloque BRICS en el comercio global, ya que su producto interno bruto actualmente supera al del G7.

Lubetkin enfatizó la importancia de enfrentar las dinámicas de regiones como Asia, África y Medio Oriente, fomentando oportunidades comerciales que respondan a la realidad de un mundo en constante evolución. “Debemos adaptarnos a las realidades globales y mantener una política de acción que garantice el respaldo de nuestros representantes internacionales y proteja sus derechos en todas las circunstancias”, añadió, refiriéndose al reciente compromiso alcanzado con Naciones Unidas para investigar la muerte de un miembro uruguayo de las tropas en el Congo, un hecho sin precedentes.

A la vez se propone transversalizar la política exterior con un eje que proyecte a Uruguay como un país articulador para la paz. En un contexto en el que la conflictividad y beligerancia se han ido incrementando a nivel mundial y el respeto por el derecho internacional parece ceder ante consideraciones de índole geopolítica, es más necesario que nunca tener un posicionamiento activo en cuanto a la solución pacífica de las controversias. En este sentido, nuestro país, por sus características de articulador y firme defensor de estos principios, puede contribuir a su vigencia y consecución. Un liderazgo mesurado, constructivo, comprensivo y respetuoso de las diversidades presentes en el escenario internacional podría ser altamente valorado por la comunidad internacional en tiempos de peligros múltiples y ánimos polarizados, pudiendo contribuir de esta manera al relanzamiento de la presencia de nuestro país en el mundo con un rol activo y positivo desde nuestras características más arraigadas y reconocidas.

En este contexto, la nueva política exterior de Uruguay se presenta como un pilar fundamental para afrontar los desafíos contemporáneos y consolidar la proyección internacional del país. Es en esa línea que Uruguay refuerza su compromiso con una política exterior de Estado, caracterizada por su inteligencia, equilibrio y visión estratégica. Este enfoque se centra en el desarrollo del interés nacional y la búsqueda de independencia, promoviendo la fortaleza de las instituciones del sistema multilateral y avanzando en el cumplimiento de sus mandatos.

Al mismo tiempo, el país reafirma su compromiso con los procesos de integración latinoamericana, desarrollando una activa política comercial que promueve el crecimiento conjunto de la región. En un mundo cada vez más globalizado y complejo, Uruguay está llamado a fortalecer la preservación y defensa de valores esenciales como la democracia, la paz y la seguridad internacionales, con especial énfasis en la no proliferación de conflictos, en particular en América Latina y el Caribe.

Este rumbo no sólo solidificará la posición de Uruguay en el escenario global, sino que también subrayará su rol como un actor proactivo y responsable, capaz de aportar soluciones constructivas a los retos internacionales mientras vela por el bienestar y los intereses de su pueblo.

Daniel Caggiani es senador del Frente Amplio y presidente de la Comisión de Asuntos Internacionales de la Cámara de Senadores.