La solución que el gobierno estudia para cumplir con la ley que reguló el mercado de cannabis (19.172), y hacerlo rápidamente, es la creación de herboristerías cannábicas, que manejarían dinero en efectivo y convivirían con las farmacias que sigan vendiendo cannabis, dinero en mano. Fuentes de gobierno adelantaron a la diaria que se aprobará un decreto para crear estas herboristerías y cumplir con la ley. Se buscarán empresarios del sector dispuestos a invertir en estos nuevos negocios con todos los controles que tienen las farmacias. Según explicaron desde el gobierno, es más fácil tratar con empresarios del rubro del cannabis que con las farmacias, que en términos generales han demostrado poco interés, a pesar de las promesas que hicieron desde 2013, cuando pidieron la exclusividad en la distribución de marihuana.

El gobierno piensa en nuevas herboristerías, creadas especialmente para vender cannabis; para evitar tratativas con los negocios ya instalados en el rubro (que, de todas maneras, podrían sumarse a la iniciativa).

La propuesta surgió luego de que los bancos en Estados Unidos alertaran a sus clientes uruguayos. La idea se planteó, incluso ante representantes de la bancada oficialista, una semana antes de que José Mujica dijera que trancaría el Parlamento si no se encontraba una solución financiera para la venta de cannabis regulado en las farmacias.

Las autoridades que llevan adelante el proceso buscarán el interés de empresarios locales para ver si existe posibilidad de llevar adelante este negocio que funcionaría paralelamente a las farmacias que deseen trabajar en efectivo.

El artículo 12 de la ley 15.703, de febrero de 1985, categoriza lo que se entiende por farmacias. Allí se explicita que hay farmacias hospitalarias, rurales, comerciales, droguerías, distribuidores farmacéuticos y también herboristerías. “Herboristería es el establecimiento comercial […] dedicado exclusivamente a la preparación, fraccionamiento y venta al por mayor y menor de las hierbas y sus mezclas, debidamente autorizadas”, dice la ley.

El presidente del Banco Central, Mario Bergara, el prosecretario de presidencia, Juan Andrés Roballo, y el subsecretario de Economía y Finanzas, Pablo Ferreri, trabajan en este decreto, que permitiría salir de la encrucijada en la que los bancos estadounidenses dejaron a la regulación del cannabis. Esta forma de dar cumplimiento a la ley es vista como una solución intermedia y rápida, aunque claramente llevará su tiempo. En los próximos días, Bergara y Roballo viajan a Estados Unidos a mantener reuniones con bancos y autoridades de aquel país.