El Consejo Directivo de la Universidad Tecnológica (Utec) presentó el jueves, en la comisión de Hacienda integrada con Presupuesto de Diputados, sus necesidades presupuestales, lo que fue contrastado, por los legisladores, con la asignación que previó el Poder Ejecutivo para la institución. Poco más de 200 millones de pesos de incremento por año es lo que requiere la Utec para seguir funcionando y para que ninguna de sus carreras, que están en desarrollo, quede por el camino. No obstante, el Ministerio de Economía y Finanzas previó una partida de 50 millones de pesos anuales más unos 30 millones de pesos de reasignación vinculados a la ley de la industria de la vestimenta; la diferencia serían unos 120 millones de pesos.

De los 200 millones de pesos, la gran mayoría, 147 millones, corresponden a la previsión de incremento de las remuneraciones, 30 millones para gastos de funcionamiento y 25 para inversiones, pero, conociendo las restricciones presupuestales que maneja el Ejecutivo, uno de los consejeros, Pablo Chilibroste, expresó enfáticamente que el rubro previsto para sueldos “tiene muy bajo o nulo nivel de flexibilidad, porque se trata esencialmente de remuneraciones docentes para cumplir con compromisos ya asumidos. No estamos planteando hacer nuevas cosas”. En cambio, para gastos e inversiones la Utec viene apelando a recursos fuera del sector público y prevé mantener esa línea.

Otra de las consejeras, Graciela do Mato, se encargó de enumerar qué carreras se verían afectadas si no se llega a los 147 millones de pesos para sueldos. Por un lado, no se podría implementar la dinámica de alternancia en la carrera de Tecnólogo en Manejo de Sistemas de Producción Lechera, ya que no se podría formar a los tutores necesarios para aplicar el modelo. Por otra parte, la carrera de Ingeniería en Mecatrónica no tendría docentes para cuarto y quinto año; las carreras de Tecnólogo en Ingeniería Biomédica y la de Tecnólogo en Jazz y Música Creativa no tendrían profesores para el tercer y último año, y faltarían los docentes para el cuarto año en la Licenciatura en Tecnologías de la Información. Ingeniería en Energías Renovables no tendría los docentes para su cuarto y quinto año; Ingeniería en Riego, Drenaje y Manejo de Efluentes va por su segundo año, por lo que no estarían los docentes del tercero, cuarto ni quinto año; Ingeniería en Mecatrónica Industrial, que va por su segundo año, no tendría los docentes para completar los tres años restantes y, en este caso, se truncaría la posibilidad de concretar una especialización en Robótica e Inteligencia Artificial en convenio con la Universidad de Santa María (Venezuela), como está previsto. Ingeniería en Logística también va por su segundo año, y no estarían los docentes para los tres años restantes.

Chilibroste resumió que en 2016 se abrieron seis carreras, y en 2017, cinco: “Son 1.700 estudiantes los que están comprometidos, porque dependen del logro de las capacidades docentes que requerimos”. Aseguró que si se restringe el presupuesto en esta etapa de crecimiento en la que se encuentra la universidad “es seguro que el proyecto no va a funcionar”. Para el país, agregó, “no debe ser tan caro apoyar este proyecto hasta que se consolide, y es mejor que matarlo en el medio de su crecimiento”.