Un Sólo Uruguay, el Movimiento Uruguay Sustentable, la coalición UPM2 NO y la Mesa Nacional de Colonos, entre otras organizaciones, presentaron ayer al gobierno 5.000 firmas contra la instalación de una nueva planta de UPM. Marcelo Nougué, integrante de USU, explicó a la diaria que el grupo piensa “seguir dando vueltas” por el interior y recolectar “más firmas” para presentar al Poder Ejecutivo. La principal objeción de USU, señaló Nougué, es que la pastera tiene “un montón de beneficios que ninguna otra empresa tiene”, y explicó que en la movilización realizada en Durazno el 23 de enero ya habían planteado su rechazo a la idea de que estuviera “instalada en una zona franca” y gozara de “exoneraciones fiscales”.

El ministro de Transporte y Obras Públicas, Víctor Rossi, dijo a Montevideo Portal que “no puede ser” que cada uno se mire “nada más que el ombligo” y no le importe cuáles son “los intereses generales”. También señaló que si bien “es cierto” que se harán puentes para “facilitar determinado flujo de madera” a la pastera, los puentes que “se critican son puentes que Uruguay necesitaba”. En ese sentido, agregó que “el país no depende de una cosa sola” y que es necesario “fortalecer la infraestructura independientemente” de UPM. “Tenemos que ser más maduros, más grandes y más generosos. Daría la impresión de que en algunos casos están deseando que las cosas anden mal para quejarse”, remató.