Finalmente, hubo foto entre los líderes de la coalición que pretende conformar la oposición, aunque sin el ex candidato del Partido de la Gente Edgardo Novick: con la presencia de los ex candidatos a la presidencia Ernesto Talvi (Partido Colorado, PC), Guido Manini Ríos (Cabildo Abierto, CA) y Pablo Mieres (Partido Independiente, PI), la fórmula del Partido Nacional (PN) encabezó un acto ayer en Punta Gorda.

Si bien se preveía que el acto empezara a las 11.00 en el Molino de Pérez, como es habitual en estos casos, se retrasó. La primera en hacer uso de la palabra fue la candidata a la vicepresidencia del PN, Beatriz Argimón, pero su discurso fue breve. Dijo que en las últimas semanas hubo una campaña “basada en la mentira” y que esa “no es la forma de construir una mejor democracia”. Además, aseguró que “bien lejos” de ellos están “los discursos y acciones políticas que tienden a querer separarnos a los uruguayos”. “Nosotros optamos por otro camino, el de la unión de todos los compatriotas”, sostuvo.

El candidato Luis Lacalle Pou, que fue recibido por el público al grito de “presidente, presidente”, sostuvo que “el primer acto después de firmado el acuerdo fue uno de los momentos más emocionantes de mi vida”. Acerca de la noche de la elección, aseguró que “los candidatos entendieron un mensaje de cambio” y agradeció el respaldo que recibió en ese mismo momento de los principales líderes de la oposición. “Qué lindo tener un sistema democrático fuerte”, dijo.

Sobre la mitad de su discurso, Lacalle Pou presentó a sus ex competidores y los invitó a subir al escenario. Empezó por el integrante del PC: “En 2013 me fui al Instituto Ceres a hablar con un economista renombrado que trabajaba en políticas públicas para el país”, recordó. “¡Vamos, Talvi, vamos!”, gritó una persona del público, y el candidato bromeó: “No me revelen el secreto; si me van a pinchar todos los globos, así no sirve”. Luego continuó: “Me quedó una espinita y dije: ‘Este hombre en algún momento va a ingresar a la actividad política’”. El nacionalista admitió que tuvo matices con Talvi durante la campaña de la primera vuelta, pero aseguró: “Lo que importa es cómo se resuelven: siempre una llamada en la noche o en la mañana, un abrazo de por medio; allí estuvo el camino en común con Ernesto Talvi”.

Después fue el turno del ex comandante en jefe del Ejército Guido Manini Ríos. “Hace muchos años que conozco a la familia Moreira [...] Hace algún tiempo, Irene, que cumple años el mismo día que yo, vino a decirme que había tomado una decisión difícil que tenía que tomar: que su compañero de vida iba a iniciar un proyecto político. Me dijo: ‘Luis, no tengo otro lugar que estar que en el proyecto con Guido’”, relató. La pareja de Manini Ríos, la senadora electa Irene Moreira, antes formaba parte del PN. Acerca de Manini Ríos, dijo que siempre se preocupó “por su tropa, por su gente”.

El último en subir fue el líder del PI, Pablo Mieres. “Siempre tuve un especial interés por entender y escuchar a los que no piensan exactamente igual que yo [...] la vida nos va poniendo gente cerca, hasta en el espacio físico. En la Cámara de Diputados estuve mucho tiempo sentado al lado del PI, y en esas charlas cotidianas fui construyendo una relación importante con sus dirigentes. Y ahora en el Senado, habiendo votado distinto [...], igual entendimos que el país necesitaba entendimientos y avanzar”. Con los cuatro en el escenario, Lacalle Pou aseguró: “Esta puede ser la famosa foto que algunos querían”.

En varios momentos de la actividad el público coreó: “Viva la coalición” y “Sí se puede, sí se puede”, y Lacalle Pou respondió: “Obvio que se puede. Hay que pensarlo, hay que soñarlo, hay que trabajar, y se puede”.

Mujica, Bolsonaro, Lula y Dios

Uno de los asistentes ayer fue el ex presidente Julio María Sanguinetti. En conversación con la prensa, dijo que el Frente Amplio (FA) critica el acuerdo de la oposición porque “está en una situación muy crítica”. Según sostuvo, “no siente exitosa [la campaña], por eso la intervinieron con [José] Mujica y [Yamandú] Orsi. Inventaron este nuevo gabinete, es la foto que estaba faltando para corroborar que es el continuismo”.

Por su parte, Talvi aseguró a la diaria que “el país necesita cambios muy fundamentales”. Sobre los dichos del ex presidente de Brasil Luiz Inácio Lula da Silva, que aseguró el sábado que hay que pedirle a Dios que gane el candidato del FA, dijo: “Los líderes de Brasil, empezando por el presidente [Jair] Bolsonaro, parece que están con una fuerte vocación de meterse en nuestro proceso electoral, algo que no corresponde. Invocar a Dios nos parece poco oportuno. Lula no debería ignorar que los uruguayos somos bastante laicos, así que no creo que esa invocación tenga mucho efecto en Uruguay”. En una misma línea, el integrante del PI y ex periodista Gerardo Sotelo contestó con ironía: “Creo que Dios, en su inmensa misericordia, también escucha el ruego de los corruptos, pero depende de los uruguayos el resultado”.

En tanto, Mieres dijo a la prensa que son “obvias” las diferencias ideológicas entre su partido y el liderado por Manini Ríos. “Las coaliciones van a seguir existiendo, se hacen entre diferentes”, justificó. En varias oportunidades Mieres había manifestado tener profundas discrepancias con CA; incluso antes de firmar el documento programático, los integrantes del PI aseguraron que las negociaciones eran con Lacalle Pou y no con Manini Ríos. Días atrás, Mieres admitió que no quería posar en una foto junto a Manini Ríos, aunque finalmente ayer cedió: “No nos resultaba cómoda una foto de familia”, había dicho a El Observador el jueves.