La Coordinación Nacional de Casa Grande, sector liderado por Constanza Moreira, emitió este sábado una declaración en la que asegura que la elección de noviembre, “pese a ser más favorable de lo proyectado”, “es una mala noticia para el país en su conjunto: para el pueblo uruguayo, en particular, para las personas más vulneradas; y para América Latina, ya que representa un retroceso sustantivo en derechos en un mapa regional donde se multiplican los gobiernos de derecha.
El sector dice que reconoce el “importante” caudal de votos que obtuvo la fórmula Daniel Martínez- Graciela Villar, “así como el papel que han desempeñado la militancia y el frenteamplismo de a pie, la izquierda social y cultural del Uruguay, autoorganizada de las formas más diversas, para conseguir estas adhesiones”.
Casa Grande asegura que el resultado de las elecciones “exige repensar la organización del Frente Amplio como fuerza política nacional, popular y democrática”. “La autocrítica debe ser sincera, fraterna y empezar por casa. No debe servir para cobrarnos cuentas”.
La declaración destaca la labor parlamentario de los senadores Moreira y Rafael Paternain “quienes trabajaron fuertemente por leyes fundamentales y transformadoras”.