“Lo saludo por respeto, pero realmente me da mucha lástima todo lo que está haciendo, porque está comprometiendo la suerte del partido”, le dijo el diputado Pablo Abdala al precandidato Juan Sartori. “Yo creo que estoy sumándole mucho”, le contestó Sartori. Antes de que pudiera seguir hablando, Abdala lo interrumpió: “No lo creo, no lo creo, no lo creo”. Sartori quedó sorprendido, esbozó la misma sonrisa que muestra en los carteles publicitarios y siguió su camino. “¿Ahora? ¿Terminó?”, le preguntó el precandidato a Alem García, su padrino político, en referencia a cómo seguía el evento en el que participaban.
Este intercambio se dio hoy al mediodía en el puerto de Montevideo, donde el Partido Nacional (PN) recordó los 35 años de la vuelta del exilio de Wilson Ferreira Aldunate. Por tanto, estaban todos los sectores nacionalistas y fue el acto con más presencia de dirigentes de todos los sectores del PN de los últimos días, a tan sólo 14 días de las elecciones internas. Así, sin querer, se preparó un caldo de cultivo para que afloraran las rispideces con el empresario devenido en precandidato. El diálogo entre Abdala y Sartori se dio luego de los discursos y antes de que representantes del directorio del PN colocaran una ofrenda floral en homenaje a Wilson.
El precandidato Jorge Larrañaga fue uno de los pocos dirigentes que no estuvieron presentes, pero, mientras se desarrollaba el acto, en su página web publicó una carta titulada “Dignidad arriba”, en la que, al igual que Abdala –que es del sector que el precandidato lidera, Alianza Nacional–, fue crítico con Sartori. En la carta señaló que es un sobreviviente de “muchas batallas” y que siempre luchó por “el partido y por el país”.“Como hace más de 40 años los blancos nos rebelamos contra el poder de los fusiles de la dictadura, hoy nos toca rebelarnos contra otro poder: el de la plata”, indicó. Escribió que el Frente Amplio “usa la publicidad oficial para mentir sobre la situación de país”, pero “también tenemos que hacernos cargo de dar una alerta dentro de nuestro propio partido”. “Hoy tenemos que censurar que se juegue con la gente; con nuestros abuelos, nuestros jubilados. Jugar demagógicamente con las necesidades de la gente que es por demás vulnerable, es descalificante y degradante. Política de la peor clase. La mala política. No todo puede valer”, señaló, en referencia a la tarjeta Medic Farma, con la que Sartori promete que los jubilados conseguirán medicamentos gratis en la farmacia, que, anuncia, empezará a tener validez cuando asuma como presidente y que ya ha comenzado a repartir, a modo de muestra.
En la carta, Larrañaga también sostuvo que su “deber” es defender a su partido frente a “promesas vacías y engañosas que nos hacen mal a todos los uruguayos”. “No puedo, no tengo derecho a convalidar con mi silencio cuando se agrede desde adentro la comunidad de valores y principios a la cual pertenecemos”, agregó. Más adelante, para que no quedaran dudas, señaló: “ustedes saben que estoy hablando del [pre]candidato Juan Sartori, que hace unos días admitió que tenía de asesor a un venezolano de apellido Rendón, experto mundial, según parece, en propaganda sucia”.
“¡Qué casualidad, de manera repentina aparecieron mexicanos interesados en encuestar en nuestro país! ¡Qué casualidad, aparecieron mensajes de Whatsapp con números de India! ¡Qué casualidad, en forma súbita apareció gente en portales desconocidos publicando cualquier cosa!”, escribió con ironía Larrañaga. Luego le advirtió a Sartori “que el PN no promete cualquier cosa y no se presta a los experimentos de mercaderes ni a la hipocresía de tartufos”. “La ética no se compra, los votos tampoco. Ahora, si quiere, vuelva a hacerse la víctima, pero los uruguayos saben que yo no hablo por hablar”, agregó. Por último, le pidió a Sartori que “haga el favor de pedir disculpas por lo que mal hace” y “desande el camino de las promesas demagógicas que juegan con las necesidades de la gente más vulnerable”. “Porque ni el PN ni el país son mesas de ruleta para su diversión”, finalizó.
“Sr. Noticias Falsas”
A todo esto, Sartori fue uno de los primeros en llegar al acto de hoy. Consultado en una rueda de prensa por la carta de Larrañaga, contestó que no tiene “ninguna crítica” para hacerle a ninguno de sus compañeros, “como nunca tuvo” desde el principio de la campaña. También se le preguntó por lo que escribió en Twitter el precandidato del Partido Colorado Ernesto Talvi: “La tarjeta de Sartori es un instrumento para perfeccionar el engaño. Cumple el rol del documento falso que siempre es más creíble que la sola palabra falsa. Es el ‘Manual del tramposo’, página 1. El ‘Manual del demagogo’ queda muy chico”. Sartori llamó a que “cada candidato se enfoque más en su campaña” antes que en criticarlo. “Yo no sé por qué están tan fascinados conmigo. Yo hago propuestas y ellos hablan de Sartori”, finalizó.
Lacalle Pou fue el último en llegar al acto y no cruzó ni una mirada con Sartori. El empresario se ubicó al lado de otro precandidato nacionalista, Enrique Antía, que tampoco le dio mucha cabida. La oradora del evento fue la presidenta del directorio del PN, Beatriz Argimón. Se entonaron el himno uruguayo y el himno nacionalista, la marcha Tres Árboles, que fue cantada con entusiasmo por la mayoría de los dirigentes, excepto de Sartori, que se quedó callado.
Al final del acto, Antía dio una rueda de prensa, en la que dijo que a Sartori no lo conoce y que Alem García “ha dicho cosas que no corresponden”. Señaló que la campaña “está linda” y que tiene una “barra muy motivada, porque en estas instancias es cuando más se ve el calor de ser blanco”. Consultado sobre la “ética” de la campaña de algunos precandidatos, dijo que “hay mensajes que se pasan de rosca”, y no es lo que quiere “ni para la interna blanca ni para Uruguay”.
Lacalle Pou se fue raudo, inmediatamente después de finalizado el acto, y no habló con la prensa. Pero, una hora y media después, escribió en su cuenta de Twitter: “¡Lo que van a ser estos 14 días! El ‘Sr Noticias Falsas’ ahora puso a circular un audio adulterado con mi voz. ¡Qué poco respeto por nuestra democracia!”.