El ex presidente José Mujica recordó al Tabaré Vázquez médico, esa vocación que “nunca pudo dejar”, y mencionó el Sistema Nacional Integrado de Salud y la batalla contra el tabaco.

Para Mujica la mejor forma de homenajearlo es que las nuevas generaciones sigan “militando por un país mejor, un poco mejor”. También dijo que si bien forma parte del recuerdo frentista, “los hombres grandes no tienen divisa, son divisa cuando se van”. “Por eso Tabaré no es sólo del Frente, es del pueblo uruguayo, de La Teja, de los postergados”.

Mujica dijo que lo que más le emociona cuando lo recuerda es el Plan Ceibal. “Se dio cuenta a tiempo de que la etapa que venía era de un mundo digital y que probablemente a los más pobres, los más olvidados, les iba a costar”. Señaló que esta política pública comenzó en un pueblo del interior y se “desparramó” por todo el interior, llegando a los “niños más postergados”. “Siempre queda como un mensaje, como una herencia y acicate de lo que puede hacer la humanidad por un mundo mejor”, acotó.

También recordó una de las últimas charlas que tuvo con Vázquez. “Me preguntó: ‘¿Dormís bien?’ Él estaba peleando con la muerte, pero no se podía olvidar de su oficio de preocupado por la vida [...]. Así era Tabaré”.

Las palabras de Lucía Topolansky

Por su parte, quien fue vicepresidenta en el segundo mandato de Vázquez, Lucía Topolansky, aseguró que el año pasado, al conocerse la enfermedad del mandatario, él le dijo: “Quedate tranquila, que al primero de marzo yo llego, pero después me voy a morir”.

La dirigente frenteamplista aclaró que pudo despedirse presencialmente de Vázquez y afirmó que será recordado como “el primer mandatario de izquierda”. “Cuando se anunciaba por todos lados que era imposible concebir para Uruguay un gobierno de izquierda, demostró que no era la realidad, que había otra mirada y otras verdades posibles; eso va a quedar en la historia nacional”.

Según Topolansky, Vázquez “hizo política hasta el final: estaba preocupado por el congreso del Frente Amplio, por la autocrítica, por salir adelante. Él no pudo hacer más cosas presenciales por la pandemia, pero participó en toda la campaña departamental a través de Zoom”.

La legisladora recordó que el ex presidente fue “hijo de obreros de ANCAP, para poder hacer su carrera tuvo que trabajar en una bodega, saliendo de un barrio proletario, como La Teja, logró ser un oncólogo destacado a nivel nacional y reconocido a nivel mundial, intendente y dos veces presidente de este país”. “La consigna que deja Tabaré es que se puede. Fue a la escuela Yugoslavia, y eso es un invitación para todos los niños uruguayos de que la educación pública da grandes personas”.