Los cambios en el organigrama del Ministerio de Defensa Nacional (MDN) tras la asunción del nuevo gobierno determinaron una mayor presencia de militares en lugares de decisión, si se compara con la última administración del Frente Amplio (FA). El subsecretario del ministerio, Rivera Elgue, coronel retirado e integrante de Cabildo Abierto, no es la única figura castrense en posiciones de mando en la cartera. En Defensa hay siete direcciones que dependen de la Dirección General de Secretaría. Desde la asunción del nuevo gobierno, la titularidad de más de la mitad de ellas corresponde a militares. En cambio, durante el último gobierno del FA sólo una de esas direcciones, la de Pasos de Frontera, estaba ocupada por un militar. Las direcciones de Recursos Humanos, Asuntos Sociales y Formación Militar, antes encabezadas por funcionarios civiles, ahora tienen a militares al mando.
El coronel retirado Gustavo Leonel Figueredo Cigliutti, director general de Recursos Humanos, ingresó a la Escuela Militar en 1982. Fue jefe del Batallón de Infantería Nº 5 y jefe del Estado Mayor de la División de Ejército II, y en 2017 fue designado director del Servicio de Retiros y Pensiones de las Fuerzas Armadas. Por esa época se comenzaba a discutir en el Parlamento la reforma del sistema de previsión social militar. La mayor retirada Roxana Berois, directora general de Servicios Sociales, es militar pero también dirigente de Espacio 40, la lista que lidera el ministro Javier García. En tanto, la dirección de Formación Militar está encabezada por el coronel retirado Alejandro Bordagorri, uno de los militares que se negaron a declarar ante la comisión de la Cámara de Diputados que investigó el espionaje policial y militar en democracia. “No tengo nada para aportar. No tengo idea y no voy a ir a perder el tiempo y a hacerles perder el tiempo a los demás”, alegó Bordagorri, consultado por la diaria el 4 de junio de 2018. Bordagorri fue jefe del Departamento II (Inteligencia) del Ejército entre 2011 y 2013.
Azucena Berrutti, ministra de Defensa Nacional del primer gobierno de Tabaré Vázquez, dijo a la diaria que “da la impresión” de que estas y otras designaciones de militares en cargos de confianza “estarían contrariando las políticas que se constituyeron en 2005 y obstaculizando las posibilidades de que el poder civil mantenga un lugar de preponderancia en el ministerio”.
Un largo proceso
El doctor en Ciencias Políticas y experto en Defensa Julián González Guyer sostuvo que el proceso de remilitarización del MDN no comenzó con el actual gobierno, sino tras la asunción de Eleuterio Fernández Huidobro al frente de la cartera, en 2011.
En 2005, con la llegada al poder del primer gobierno del FA, se inició un proceso de creciente participación de los civiles en lugares de decisión en un ministerio comandado mayormente, hasta ese entonces, por militares. Este cambio de perspectiva se consagró con la aprobación de la Ley Marco de Defensa Nacional en 2010, pero esta norma “perdió su verdadero sentido” durante la gestión de Fernández Huidobro, opinó González Guyer. “Se aplicaron elementos [de la ley] pero al servicio de la institución militar, hubo un reempoderamiento de los militares, a pesar de que en el Ministerio de Defensa se mantuvieron los cargos civiles”, consideró.
González Guyer opinó que incluso los directores generales nombrados durante la gestión de Azucena Berrutti “nunca tuvieron efectivamente esas potestades” de mando, ya que “no existía una inserción clara desde el punto de vista orgánico” de sus cargos, y al mismo tiempo “los comandantes en jefe y el director del Servicio de Retiros y Pensiones, entre otros, mantuvieron la autonomía que tuvieron toda la vida”. “Esos directores generales nunca tuvieron una inserción real, nunca fueron dirección real, porque el ministerio nunca fue una dirección real de las Fuerzas Armadas”, afirmó el experto.
Durante la gestión de Fernández Huidobro, en tanto, hubo “un fuerte empoderamiento de las Fuerzas Armadas, con [Guido] Manini a la cabeza”. Y en los últimos años, “los militares se levantan”.
En cuanto a la posición del gobierno actual, el experto consideró que la administración de Luis Lacalle Pou “expresa las opiniones de la corporación militar”, y en ese marco, “lo de los directores [la designación de militares en esos cargos] es lo de menos”.
De primera y de segunda
“El Ministerio de Defensa Nacional está en manos del poder civil. El que discuta eso está en otro país”, dijo a la diaria el ministro Javier García. Aseguró que Cabildo Abierto nombró solamente a los directores de Formación Militar y de Recursos Humanos, y que en el resto de los cargos fueron designadas personas de confianza del ministro. Por ejemplo, Roxana Berois, si bien es militar, fue odontóloga en el Hospital Militar y “es una persona con la que he trabajado personalmente, es compañera de trabajo político hace añares”, dijo García.
Se preguntó por qué es legítimo discriminar entre militares y civiles en el MDN, y en cambio no se hace lo propio en otros ministerios, como en el de Salud o en el de Transporte y Obras Públicas. García recordó por otra parte que el FA fue fundado por militares y apuntó que un militar, Jaime Igorra, fue subsecretario del Ministerio de Vivienda, Ordenamiento Territorial y Medio Ambiente durante el primer gobierno del FA. Además, sostuvo que “nadie cuestiona que en el Ministerio de Economía [y Finanzas] haya economistas” y en cambio sí se critica la presencia de militares en el MDN. “¿Por qué se cuestiona una profesión? No encuentro justificación. Si no, partimos de la base de que hay profesiones de primera y profesiones de segunda”, manifestó.
La Comisión de Defensa del FA está analizando este tema y el próximo jueves mantendrá una reunión con el ministro Javier García, informó a la diaria su presidente, Gustavo Scaron, quien no quiso hacer declaraciones hasta que el encuentro se concrete.