El 5 de diciembre el Frente Amplio (FA) elegirá a los integrantes del Plenario Nacional, de los plenarios departamentales, a su presidente a nivel nacional, y también a los 19 presidentes de las departamentales.

En estos días se vienen definiendo las precandidaturas en cada uno de los departamentos. En Canelones, el Plenario Departamental para habilitar a los candidatos será el domingo, desde las 10.00, en La Huella de Seregni.

Esta semana en la Mesa Política Departamental se presentaron cuatro nombres. Uno es el de la actual edila Susana Muñiz, del Partido Comunista, que en Canelones se presentó en las departamentales de 2020 en alianza (lista 1916) con el Encuentro 18 de Agosto, la Amplia (42020), la Corriente Frenteamplista Canaria y el Movimiento Soledad Barrett, todos grupos que siguen trabajando juntos, según Muñiz. Pero la exministra de Salud Pública entre 2013 y 2015 también tiene el apoyo del Partido Socialista, la 5005, el Partido Obrero Revolucionario, la Liga Federal, Casa Grande, y las listas 1813, 711, 2040, 6009 y 8703. Vale recordar que Muñiz también fue presidenta de la Administración de los Servicios de Salud del Estado (ASSE) entre 2015 y 2018, y es diputada suplente por el departamento. Es médica y profesora de Biología, y fue directora del Centro de Salud de Ciudad de la Costa.

Otro precandidato es el diputado Oscar Amigo, del Movimiento de Participación Popular, impulsado por su sector, y que ya ha recibido el apoyo del Nuevo Espacio, Partido por la Victoria del Pueblo, El Abrazo, Rumbo de Izquierda, la lista 624 y el espacio 1811. Amigo asumió una banca en la Cámara de Representantes cuando el titular Pedro Irigoin pasó a ser director general de Administración de la Intendencia de Canelones.

Por su parte, el Partido Demócrata Cristiano (PDC) definió impulsar la candidatura de su edila suplente Mónica Bueno. Bueno es docente y trabaja desde hace 20 años en la educación. Para la elección departamental de 2020, el PDC formó parte de una alianza (lista 939) junto con Marea Frenteamplista, Banderas de Liber, Reafirmación Frenteamplista, De Frente, Frenteamplistas Independientes con Ética, Fuerza Renovadora y Movimiento Humanista.

Finalmente, la cuarta precandidata es Amalia Fiermari, presentada por las bases, que vive en Barros Blancos. Fiermari trabaja para la intendencia como gestora cultural para la Dirección General de Cultura en el Espacio Cultural Chalet Rovira de esa localidad. Es dirigente sindical e integrante de la dirección de Adeom Canelones, donde participa también en la Comisión de Género y Equidad.

Desde la renuncia de Mariano Bianchino, el año pasado, la conducción de la departamental canaria está en manos de una terna, hasta la elección de diciembre. Según pudo averiguar la diaria, la idea que prima en la mayoría de los sectores y en las bases es habilitar las cuatro candidaturas.

Cuatro fotos y una palabra

la diaria dialogó con los cuatro precandidatos para que contaran brevemente sobre sus propuestas de cara al Plenario del domingo.

Para Muñiz, “Canelones es un departamento estratégico y por algo hay una disputa entre el gobierno nacional y el FA”. “El FA tiene que fortalecerse, tiene que salir a hablar con las vecinas y los vecinos, tiene que tener mayor presencia, estar no solamente en las grandes ciudades del departamento, sino en todo el territorio. Creo que hemos descuidado en los últimos años buena parte del noreste de Canelones”.

Muñiz también cree que hay que trabajar en la inclusión de los jóvenes en la fuerza política y encontrar objetivos estratégicos y una metodología de trabajo: “Trabajar mucho en equipo”. Además, considera que se debe mejorar la comunicación externa e interna.

Por su parte, Bueno destacó que se debe escuchar tanto a las mayorías como a las minorías, que “tienen mucho para decir y para aportar”. Pero también “a las mujeres, los jóvenes, los gurises en los barrios, en los comités, la gente de base. No hemos tenido una lógica de escuchar, de retroalimentarnos”, expresó. Para Bueno, ha habido “algunos mojones importantes”, como durante la pandemia, que han demostrado que las bases “se fueron organizando en los comités, en los barrios, para ayudar en ollas, con canastas, en los sindicatos, y también con la gran movida de la recolección de firmas, que mostró que acá estamos”. “En el FA a veces parece que los sectores van por un lado, pero nosotros vamos por este otro camino, el de la escucha, de la solidaridad del trabajo compartido. Esta es la forma que nos convence y es lo que queremos para la política. Mucho territorio, mucho trabajo en equipo, mucha observación y que eso sirva para tomar decisiones. A veces en el FA son algunos pocos los que toman decisiones y eso hace que no todos nos sintamos representados”, concluyó.

Amigo sostuvo que para él “lo principal es que el FA sea constructor de esperanza, que para la mayoría de la sociedad vuelva a ser la expresión política de las mayorías, y bajo ese paraguas, tiene que abrir las puertas de par en par”. “El FA tiene la necesidad de entablar instancias de diálogo con todas las expresiones de la sociedad, y ese es un primer desafío. Ahí entran los sectores más afines históricamente, como los trabajadores organizados, los estudiantes, las cooperativas, pasando por los sectores sociales y económicos que han sido perjudicados por las políticas del gobierno, que son los sectores productivos, el turismo, las pymes [pequeñas y medianas empresas]”, agregó. Para el diputado también hay que “volver a entablar un espacio importante con la academia y la ciencia. No sólo por todo lo que han demostrado en este período, sino porque hay un vínculo histórico” que se ha perdido a nivel nacional y departamental. “Hay que abordar la realidad con otra profundidad y establecer un pensamiento estratégico, y también abrir la puerta para la renovación en todo sentido”, valoró. En cuanto a la fuerza política a nivel departamental, Amigo cree que es necesario “pasar a un trabajo de dirección, de quienes tienen capacidad de conducción, con un equipo más colectivo, más grande, con un sentido de equipo que va a permitir subir un escalón en el desarrollo de la fuerza política”.

Fiermari dijo que “la presidenta/e del FA tiene que tener una realidad de lo que es el departamento, y quienes tienen eso son las bases como organismo político de proximidad”. Por eso, para ella “el objetivo es seguir desarrollando el FA en el territorio, como bien lo demostró la última instancia electoral de noviembre, donde las bases y los jóvenes llegaron a recuperar casi 200.000 votos basados en la militancia de los comités”, agregó. “El FA tiene que tener una conducción que conozca el mecanismo de las bases, que es lo que hoy está subrepresentado, más representado por sectores que por las bases. Es justo que estas tengan el mismo poder y puedan tomar las mismas decisiones que los sectores, ya que las bases son las que caminan en el territorio. Pero también agiornado a la nueva agenda de derechos, con mayor participación y responsabilidad de las mujeres en el poder. Es hora de una mujer en la presidencia del FA de Canelones, segunda departamental en importancia del país”, sostuvo.

Fiermari piensa “profundizar” el programa de gobierno del FA para el departamento y “si de ideas fuerza se trata, hacia las internas” insiste en “mayor inserción social y barrial y en las diferentes regiones del departamento”. “Queremos un FA que sea más participativo, agiornado al siglo XXI” con las bases como “herramienta histórica de proximidad de nuestra fuerza política, la cual nos diferencia de cualquier partido político en la historia del Uruguay”, concluyó.

Todos los candidatos subrayaron como uno de los mayores desafíos de la etapa la campaña para la derogación de 135 artículos de la ley de urgente consideración, en la que los cuatro se comprometieron a poner todas las baterías, sean habilitados o no.