El gobierno de Argentina sostiene que Chile pretende adueñarse de parte de su plataforma marítima, luego de comprobar que Santiago estableció nuevos límites, que se superponen con los argentinos, en el extremo sur de los territorios limítrofes de ambos países.

Un comunicado del Ministerio de Relaciones Exteriores argentino planteó que un eventual conflicto debe zanjarse “a través del diálogo”, pero advirtió que “la pretensión chilena no es aceptable”, de acuerdo a lo que consignó Radio Francia Internacional.

“La medida intentada por Chile pretende apropiarse de una parte de la plataforma continental argentina y de una extensa área de los fondos marinos y oceánicos, espacio marítimo que forma parte del Patrimonio Común de la Humanidad de conformidad con la Convención de las Naciones Unidas sobre el Derecho del Mar”, indicó el gobierno del presidente Alberto Fernández.

La cancillería que encabeza Felipe Solá recordó que el diferendo deberá contemplar “la histórica hermandad de nuestros pueblos y el derecho internacional”. La declaración puntualizó que la medida del gobierno chileno “pretende proyectar la plataforma continental al Este del meridiano 67º 16’ 0, lo cual claramente no condice con el Tratado de Paz y Amistad celebrado entre ambos países en 1984”.

El comunicado argentino subrayó que “el límite exterior de la plataforma continental argentina en esta zona se refleja en la Ley Nacional 27.557, aprobada el 4 de agosto de 2020 por unanimidad en ambas Cámaras del Congreso de la Nación y promulgada por el Poder Ejecutivo el 24 de agosto de ese mismo año”.

“Dicha ley no hace sino recoger en una norma interna la presentación oportunamente efectuada por el Gobierno argentino sobre dicha zona ante la Comisión de Límites de la Plataforma Continental”, sostuvo la cancillería argentina.

Pero desde Santiago la visión del tema es otra.

“Lo que Chile está haciendo es ejercer su derecho y declarar su plataforma continental”, expresó el presidente Sebastián Piñera en una entrevista con El Mercurio, en la que aseguró que buscará un camino de diálogo con Argentina. Además, en una conferencia de prensa realizada este domingo en La Moneda, el canciller chileno, Andrés Allamand, también se refirió al reclamo argentino y afirmó que se contactará con Felipe Solá, para resolver el tema a través del “diálogo diplomático”.

“Chile valora muy positivamente la coincidencia que hay entre la Cancillería argentina y la chilena en cuanto a que esta diferencia deberá ser resuelta a través del diálogo de acuerdo a la histórica hermandad de nuestros pueblos y al derecho internacional”, destacó Allamand, según informó La Tercera.

Aun así, el jerarca chileno señaló que la acción de actualizar la Carta Náutica 8 fue conversada previamente “con la expresidenta [Michelle] Bachelet, los expresidentes [Ricardo] Lagos, [Eduardo] Frei Ruiz-Tagle y todos los cancilleres de las distintas administraciones a las que he hecho referencia. Todos han coincidido en respaldar esta gestión”, aseguró. Y, en esa línea, expresó que “Chile quiere dejar establecido que no concuerda con la Cancillería argentina con que la actualización de la Carta [Náutica] 8 pretenda apropiarse de una parte de la plataforma continental extendida argentina y de un área de fondos marinos y oceánicos, que son patrimonio común de la humanidad”.