En la última Mesa Política del Frente Amplio (FA), el 11 de setiembre, el presidente de la fuerza política, Fernando Pereira, les transmitió a los asistentes la necesidad de resolver cómo procesar la discusión en relación con el plebiscito contra la reforma de la seguridad social que impulsa el PIT-CNT, luego de que la central sindical definiera el texto de la papeleta. Pereira adelantó que en la sesión siguiente –es decir, la de este lunes– llevará una propuesta sobre “cómo debatir el tema”. En diálogo con la diaria, adelantó que planteará “resolver antes del Congreso” y cómo debería ser el proceso previo.

Definir un camino y una postura se vuelve imperativo para el FA, puesto que los tantos están divididos entre los sectores que apoyan la consulta popular y los que entienden que el camino a seguir es el de convocar un “diálogo social” –como anunció el propio Pereira el 26 de marzo– en caso de retomar el gobierno, para el 2 de marzo, donde se reúna a “todos los actores” para elaborar una nueva ley.

La senadora Sandra Lazo, del Movimiento de Participación Popular (MPP), recordó en diálogo con la diaria que el sector tomó “una decisión respecto a este tema” en el sentido de que el FA no debería “distraerse con otro tema” de cara a las próximas elecciones, pero en el entendido de que hay sectores que se encuentran alineados con el PIT-CNT en este asunto, entienden que “la clave es dar una discusión en unidad” y “tomando en cuenta los intereses y las propuestas que hay”.

La segunda clave, para Lazo, está en “ir a una elección nacional sin movernos de los objetivos” y tener en cuenta “los tiempos que vienen”, con el Congreso de diciembre como uno de los mojones de este semestre, donde se votará la versión definitiva del programa y también se aprobarán las precandidaturas de cara a la interna. Por eso, es necesario “cerrar este paquete y transitarlo de la mejor manera posible” y definirlo en “lo que queda hasta noviembre”, consideró. Consultada sobre la posibilidad de dar libertad de acción a los sectores, la senadora entendió que “puede ser una de las posturas que preserve a los compañeros que quieran salir con este tema”.

Para la también senadora Silvia Nane, si bien dijo que “hay que ver” qué propone Pereira, “probablemente” se defina dar la discusión antes de diciembre, más que nada “por una cuestión de orden de las actividades”, puesto que “después del Congreso tenés que salir más o menos con un plan de trabajo afinado”. Lo de este lunes consistirá en “definir cómo lo vamos a discutir, en qué ámbitos y a partir de ahí empezar a caminar con las definiciones que se den en la Mesa Política”, apuntó.

Libertad de acción

En paralelo, una comisión del FA trabaja en el documento que servirá de base para el diálogo social por la seguridad social que se pretende iniciar en caso de conseguir el gobierno en 2024. Jorge Polgar, del espacio Convocatoria Seregnista-Progresistas (CSP), integra la comisión. “Puestos en tecnócratas”, llamar a un diálogo social “es lo que recomienda la OIT [Organización Internacional del Trabajo]”, pero “puestos en políticos”, se trata, según Polgar, del “camino más cómodo para el FA”.

“El FA antes del Congreso tendrá que aprobar ese documento y tomar posición sobre este plebiscito”, estimó, aunque recordó que “la posición de CSP es en contra de esta ley, a favor del diálogo social y contraria al plebiscito por forma y contenido”, puesto que “es malo desde el punto de vista de la reforma en sí misma, es malo políticamente –y no sólo electoralmente– y es malo institucionalmente”.

En definitiva, el objetivo es “quedar con este tema despejado” antes de fin de año, y si bien “la libertad de acción es una respuesta” a la que se puede llegar y es lo más “probable”, en la CSP quieren “convencer a los frenteamplistas a favor del diálogo social”. “Nadie tiene por objetivo, cuando tenés una convicción, no militarla; nosotros tenemos nuestra convicción y vamos a militarla dentro del FA”, sentenció.

La Vertiente Artiguista, al igual que CSP, se ha manifestado en contra del plebiscito. Su representante en la Mesa Política, Adriana Barros, dijo a la diaria que desde su perspectiva “el camino más fácil es dejar en libertad de acción a los grupos”. Si bien “varios nos expresamos en contra y entendemos que no es el camino más adecuado el de poner en la Constitución esas cosas” y siguen “manteniendo la postura de lo que dijimos en marzo, de ir hacia un diálogo social”, Barros consideró que el mejor ámbito para definirlo “es un plenario”, y si bien “el límite para juntar las firmas es abril, cuanto antes salga mejor, porque así se despeja el tema”.

Definir la libertad de acción “sería el ideal”, es decir, “no obligar a nadie a militar algo que por equis motivos no acompaña, y habilitar a quienes sí creemos en la necesidad del plebiscito a que podamos hacerlo”, afirmó la delegada del Partido Socialista en la Mesa Política, Daniela Brandon, en diálogo con la diaria.

La lectura de Casa Grande, otro de los sectores que apoyan la consulta popular, “depende de lo que plantee Fernando en la Mesa Política”, señaló su representante, Susana Kaufman. Si bien no saben cuál es el planteo, sí concuerdan en que “quien toma la decisión” deba ser “un plenario y no la Mesa Política”. De todas formas, “lo que debe salir mañana es una propuesta lo más amplia posible; amplia en el sentido que se sientan todos los sectores comprendidos”, evaluó la delegada.