Este domingo, en el Club Uruguay, se llevó a cabo el lanzamiento del Centro de Ideas Rosa Luxemburgo (CIR), que pretende ser un espacio “de síntesis, con aportes de personas distintas” y generar “ideas nuevas, innovadoras, que permitan construir respuestas”, explicó su presidenta, la licenciada en Desarrollo Mariana Chiquiar. En el lanzamiento participaron la precandidata a la Presidencia por el Frente Amplio (FA) Carolina Cosse y la senadora chilena Isabel Allende, hija de Salvador Allende, mandatario derrocado por la dictadura chilena que se suicidó cuando los militares ingresaron por la fuerza al edificio de gobierno, en 1973.

El trabajo del CIR se estructura en seis ejes, con un equipo encargado de producir conocimiento en cada uno de ellos: desarrollo económico, ambiente, derecho y convivencia, educación y cultura, inserción internacional y ciencia, tecnología e innovación. Rosa Luxemburgo fue una líder revolucionaria y exponente de la socialdemocracia alemana, asesinada en 1919.

El primer conversatorio se tituló “Los desafíos de la desigualdad: la vigencia del Estado de bienestar”, y en su oratoria Cosse ironizó con que “en esta campaña parece que todos somos progresistas”, por lo que el FA tiene que echar mano de su “diversidad de sensibilidades” para “tratar de encontrar la forma de conversar con toda la sociedad sobre la desigualdad”.

La intendenta de Montevideo apuntó que, a veces, “distraída por la lucha propia o abrumada por la realidad propia, una puede tender a pensar que la realidad es así y está en una zona frágil de la sociedad”, pero, sin embargo, “eso les pasa a muchos otros colectivos en todo el territorio nacional”. “Por eso es necesario que hablemos con quienes más sufren esa desigualdad”, capitalizando el FA “todas sus sensibilidades para que nos planteemos un problema que va mucho más allá de las cosas difíciles que ya hace el FA, como escribir un programa”, reflexionó.

Asimismo, Cosse dijo que “lo que subyace es la opción de conformarse con la vida propia o no conformarse”, lo que entendió también que es “un desafío para el CIR en su propia confección y su funcionamiento”, y superar lo que consideró que es una idea instalada de que “hay gente para pensar y gente para hacer”. “Si este es un centro de ideas, tiene un desafío”: el de “preguntarse '¿dónde tengo que golpear con el martillito para ir derribando el mundo de la desigualdad?”, marcó.

Allende: “No basta con tener ideas, debemos ser capaces de ser buenos gestores”

A su turno, Allende marcó que América Latina es “la región más desigual del mundo” y se trata de una desigualdad “que cala en todos los sentidos de la vida”. Por eso, “es muy dramático si no podemos generar las condiciones para que las personas se puedan desarrollar en todos los aspectos de su vida”, más cuando se vive “en un mundo globalizado” que se vuelve “autoritario” y donde “los cuestionamientos al sistema político son cada vez más fuertes”, evaluó.

La legisladora chilena hizo un recorrido histórico de su país, en el que resaltó que la salida de la dictadura de Augusto Pinochet estuvo acompañada con la imposición de un “extremo modelo neoliberal”, por lo que el pasaje “a un Estado de bienestar no es algo sencillo”. “No basta con tener ideas, debemos ser capaces de ser buenos gestores, ser capaces de demostrar que somos, podemos y debemos ser eficientes a la hora de administrar”, enfatizó.

El modelo “neoliberal extremo” al que se refirió Allende “ha acentuado un individualismo brutal” que “penetró muy profundamente”. “Nuestras empresas públicas dejaron de serlo” y se quedaron con “un sistema previsional en el que no hay aportes de los empresarios, sólo se jubila la persona con lo que logró ahorrar en su vida laboral”, y hoy el gobierno tiene el desafío de “generar un cambio para que los empleadores por lo menos aporten un 6%”, describió.

“Vivimos en un mundo de enorme desconfianza y la gente lo que quiere es encerrarse en su casa”, por eso, señaló, “es importante tener un centro que abra las puertas, que invite a jóvenes a pensar, mirar y ver puntos de desafío”, remarcó Allende.

Por otra parte, para la senadora chilena, la desigualdad también se refleja en lo “subrepresentadas en todos los niveles” que están las mujeres, “siendo 51% de la humanidad”. En esa línea, subrayó que “las mujeres son las que se hacen cargo de las personas no autovalentes”, y planteó la necesidad de generar un sistema de cuidados en Chile, con un “Estado presente”, que además garantice “servicios básicos como la educación, la salud y la vivienda”.

En otro tramo de su discurso, Allende señaló que América Latina está “viviendo un gran proceso migratorio” y que “en Chile se ha vuelto la panacea del discurso de la derecha decir 'no queremos más migrantes'” ante “la huida de seis o siete millones de venezolanos de su país por la falta de democracia”, aseguró Allende. Usó este ejemplo para hablar de los que, entiende, son los “desafíos de hoy”, entre los que también mencionó la necesidad del Estado de “generar mejor tecnología” y “entender que la inteligencia artificial llegó para quedarse”, por lo que llamó a “dejar esa rigidez que a veces nos caracteriza y entender que vivimos en un mundo dinámico”.