Cinemateca vuelve este fin de semana a llevar cine a la televisión. Hoy a las 22.00 se emite Parabellum (Lukas Valenta Rinner, 2015). La historia comienza con una alerta natural que sacude a la ciudad de Buenos Aires. No se sabe exactamente el contexto general, pero sí que hay un grupo de ciudadanos reclutados para un entrenamiento especial en Delta del Tigre.
Un hombre sale de su rutinario trabajo de oficina, le lleva flores a otro que parece estar por morir y deja a su gato en una especie de hotel para felinos. Un mensaje en la contestadora le reclama una deuda de varios meses mientras él, sin hacer movimiento alguno, se encuentra mirando al horizonte, convencido del inminente desastre.
Se une a un grupo variado de personajes en una especie de campamento de verano con cabañas de madera. Se les ofrecen varios servicios –opcionales, como clases de política, y obligatorios, como supervivencia en el agua–. En pocos días este grupo variopinto de humanos entrenará uniformado diferentes técnicas de golpes, camuflaje, y correrá en círculos tirando balazos para todas partes.
No se entiende la seriedad de este proyecto, ni del estado real de los personajes. ¿Estarán frente al fin del mundo? ¿Contra quién están peleando?
Todo parece ser producto de un grupo de delirantes hasta que comienza la fase dos del programa. Solos, con lo que aprendieron, deberán sobrevivir con lo que se les cruce.
Un aparente resort que pagan las personas para vivir experiencias exóticas se transforma en un inhóspito lugar en el que hay que encontrar una cabaña, y un sorpresivo y letal meteorito vuelve real lo que creíamos fantasía. Ahora sí, toca sobrevivir.
Como ya cuentan las películas de catástrofe, la supervivencia no es para todos. En esta trama los más débiles quedarán por el camino y sobrevivirá el más vivo, ni siquiera el más fuerte.