Los sábados y domingos de abril (a las 13.00) en Implosivo Artes Escénicas (Isla de Flores 1438 esquina Barrios Amorín) se presentará Cleopatra y los perros, escrita y dirigida por Sebastián Calderón, y con un elenco integrado por Melisa Artucio, Graciela Ingold, Leo Rolfo y José Pagano.

El director explica que, luego de que un familiar cercano falleciera en forma repentina y poco comprensible, la creación de esta obra fue el mecanismo que encontró para ensayar posibles preguntas y respuestas. Si bien Cleopatra y los perros “no intenta indagar sobre las causas de esta muerte misteriosa, sino que se posiciona luego de este suceso, y trabaja a partir de los días posteriores a la muerte”. De modo que la pregunta principal de la obra no es “¿qué está pasando?”, sino “¿qué hacemos con esto que sucedió?”.

Para él se trata de un “curioso doble ejercicio de toma de distancia”, ya que implicó salir de la dinámica cotidiana del duelo para refugiarse en una sala de ensayo y, una vez ahí, involucrarse con las emociones que vivía durante esos primeros días. Ahora, luego del estreno, dice que el teatro siempre le ha brindado esa calma necesaria para sobrellevar los golpes, “pero esta vez fue bastante más que eso, ya que durante el proceso de ensayos apareció la sensación sanadora de que estar haciendo esta obra era una de las formas que tenía de seguir encontrándome con mi prima”, incluso cuando la puesta no hable de ella, ni recurra a elementos biográficos o situaciones compartidas.

Reconoce que el disparador de esta pieza es muy distinto al de las anteriores (Otros problemas de humanidad, Lo contrario), por lo que el resultado presenta un “tinte menos cómico o ridículo”, y un carácter más metafísico, lo que lo llevó a jerarquizar “la búsqueda de atmósferas –por momentos más densas, por otros más luminosas– por encima de la aparición de efectos y estímulos constantes a la recepción (algo más característico de Otros problemas de humanidad) o la construcción de hilos situacionales enrevesados (como en Lo contrario)”.