Si alguna serie puede considerarse el mascarón de proa de Star+ (ahora ubicado dentro de Disney+), es El encargado, la creación de Mariano Cohn y Gastón Duprat (dupla que prolifera bastante en la misma plataforma, con otras series como Bellas Artes) que se ha transformado en su gran éxito con dos temporadas estrenadas y la tercera por llegar esta semana.

¿Qué hace tan particular esta serie? Quien le da nombre al asunto es Eliseo (interpretado cada vez mejor por Guillermo Francella), el portero de un lujoso edificio en Belgrano, Buenos Aires, quien debería ser el encargado de los asuntos del lugar pero excede ampliamente sus límites y atribuciones. Entre otras cosas, ingresa a los departamentos cuando están vacíos (o cuando sus inquilinos duermen) y bajo su máscara de solícita atención y amabilidad esconde a un tipo muy oscuro. Poseedor de muchas aristas y particularmente difícil de encasillar, el personaje es por momentos un desequilibrado, cuando no un franco criminal, pero en muchas ocasiones es también un tipo decente y capaz de respaldar o ayudar a otros.

Sus impiadosos manejos lo han llevado a tener el edificio bajo su completo dominio para la segunda temporada. Los siete episodios que la componen, liberada de presentaciones y episodios de relleno, funcionan como un relojito. El poder que Eliseo ha confirmado se ve amenazado por la llegada de una nueva propietaria: Lucila Morris (María Abadí), quien pronto revisa la cuentas del lugar y le resultan demasiado altas. Los números no cierran debido no sólo a la intervención de Eliseo, sino a los manejos inescrupulosos del consejo a cargo del consorcio, encabezado por el que hasta ahora ha sido el mayor enemigo del encargado, el abogado Matías Zambrano (un Gabriel Puma Goity que se luce), quien pronto estará también en la mira de la recién llegada.

Así, una inesperada alianza se produce entre los antiguos antagonistas, unidos ante el enemigo común. El relato tiene bastantes aristas y muchas caracolean en el pasado del propio Eliseo, que recibe la llegada inesperada de su sobrino Maxi (estupendo Martín Slipak, una gran adición al elenco). Así, nuevamente, el poder de Eliseo se verá amenazado, pero nosotros ya sabemos que sólo será cuestión de tiempo para verlo ordenarse y salir adelante, porque el gran disfrute de la serie está en las maquinaciones maquiavélicas del personaje y en ver interactuar sin freno a Francella con Goity, en algo que por mí podría ocupar cada minuto de la serie.

La nueva temporada llevará a más al encargado –o al menos eso indica el tráiler– al extraerlo del micromundo del edificio –que tan al servicio de la comedia y la tensión interna ha funcionado– para ponerlo en situaciones bastante inesperadas. Si todo sigue funcionando tan bien como hasta ahora, no podemos esperar nada que no sea bueno.

El encargado, segunda temporada. Siete capítulos de media hora. En Disney+.