“TacuaNoise es la prueba de que se puede hacer música y arte de forma autogestionada”, dice Federico Cáceres, cocreador del festival de música independiente que ya lleva cinco ediciones en Tacuarembó y llega este domingo por primera vez a Montevideo.
“TacuaNoise es nuestro intento de generar una ventana de visibilidad para el indie de Tacuarembó”, agrega Natalia Soboredo, también responsable de la producción. El festival nació de su inquietud luego de encargarse del Festival Alternativo, y comenzó a gestarse a la par de las bandas Incluso Si Es Un Susurro Soviético y Julia Lunar, que ella y Cáceres integran. “El impacto en Tacuarembó fue muy positivo: con cada edición el público crece y se consolida. Ya no es sólo nuestro, es el festival de Tacuarembó”, reflexiona. “Lo más importante es que ha impulsado nuevas bandas”, agrega Cáceres. “Estamos viendo cómo crece una nueva generación de músicos en el interior del país”.
En ese contexto, el organizador entiende el traslado del festival a la capital como “una oportunidad de mostrar lo que sentimos y vivimos en el norte del país y de entrelazar lazos con la escena montevideana”. “TacuaNoise es un puente que conecta a Tacuarembó, Montevideo y Buenos Aires, a bandas emergentes con bandas de más trayectoria, y a un público abierto a escuchar sonidos nuevos”, define Soboredo. La quinta edición –con Hablan por la Espalda y los argentinos de El Club Audiovisual– marcó el inicio de esa triangulación regional: “El hecho de que un festival del interior convoque a bandas de la capital y de la región es un logro que nos llena de orgullo”, añade Cáceres.
Nostalgia futura
“El TacuaNoise tiene algo fundamental en estos tiempos: la mística. Esa que te hace sentir que estás viviendo algo que, al menos nosotros, vamos a recordar por el resto de nuestras vidas”, dice Soboredo. La construcción de una nostalgia futura, tan pertinente para la fecha elegida, es lo que refiere Niño Gutiérrez, proyecto de posmilonga con raíces tacuaremboenses que integra la grilla del domingo. Leandro Dansilio, de Excelentes Nadadores, concuerda: “Encontramos una impronta que conecta con el tipo de festivales en los que hemos participado y organizado en tiempos pasados, y a la vez nos entusiasma porque carga con una nueva energía generacional y regional”.
Además de ellos y de los fundadores Julia Lunar e Incluso Si Es Un Susurro Soviético, estarán en esta edición el indie pop de Julen y la Gente Sola, Solo Bueno –con su punk rock de la escuela de Blink-182, que pelea cabeza a cabeza con Jesús Negro y los Putos por el puesto de “el pogo más grande del under”–, Atropelló, Mató y Huyó, y El Nota, la nueva sensación del indie argentino, que está a punto de lanzar su primer disco de estudio.
“El universo TacuaNoise es una mezcla de muchas cosas y personas que nos importan. No es sólo música, es una forma de hacer”, sostiene Soboredo, al tiempo que destaca la identidad gráfica de Gabriel Ameijenda (esta vez con la banana de Warhol convertida en bombilla), las visuales de Marcio Cuello y la musicalización de DJ Gorda Mala, álter ego de Flavio Lira (Amigovio, Carmen Sandiego). “Un proyecto es compatible con el TacuaNoise cuando tiene una propuesta honesta y una sensibilidad artística que se alinea con la nuestra”, resume Soboredo, y Cáceres agrega: “No seguimos las modas, elegimos lo que nos conmueve”.
Así llegó a la programación el documental Criaturas del pantano, registro de 1994 en Amarillo con Chicos Eléctricos, Buenos Muchachos, Trotsky Vengarán, La Hermana Menor y Neanderthal. “Es una pieza clave que enriquece esta edición, una forma de conectar el pasado con el presente de la música independiente uruguaya”, defiende Cáceres, comparándolo con su propia realidad. “La idea de que, dentro de unos años, alguien pudiera mirar hacia atrás y ver cómo se gestó y creció el TacuaNoise sería increíble. Nos encantaría que sirviera para inspirar a otros a hacer cosas en sus propios lugares”, imagina Soboredo.
“Soñamos con que TacuaNoise se convierta en un festival de referencia para la música independiente, donde los artistas y el público se sientan como en casa”, manifiesta la organizadora, y confirma que si bien proyectan llevar el festival a otras ciudades, el corazón de TacuaNoise seguirá latiendo cada diciembre en Tacuarembó.
TacuaNoise. Domingo 24 de agosto, desde las 16.00 en Sala Rincón (Rincón 732). Entradas a $ 550 en Redtickets.