Hola, vecino, ¿qué tal? Le quería pedir mil disculpas por lo del otro día. Usted vio cómo es, uno anda distraído y no se da cuenta. No vi que estaba su perro suelto ahí en la plaza, entre los arbustos. Me descuidé, la verdad. Con esto de la pandemia era la primera vez que llevaba a mi hijo, y claro, tiene un año y medio, es difícil comunicarse. Si hubiese sabido que estaba su perro, obviamente no hubiera dejado suelto a Mauri ahí, faltaba más. Entiendo la molestia, a nadie le gusta salir a pasear a su perro y que le dejen un chiquilín tan chico cerca, y encima suelto. Tal vez en otro contexto hasta se podrían haber llevado bien, pero claro, al no saber hablar ninguno de los dos, es probable que la comunicación entre ambos no haya fluido mucho y bueno, pasó lo que pasó. Su perro se enfureció con el Mauri, usted se enojó conmigo y la verdad que tienen razón. Me pongo de su lado y tienen razón, por eso vengo a pedirles disculpas, a usted y a su perro, porque, como dicen ahora, tengo empatía. Ojo, vengo yo en lugar del Mauri, no sólo porque él tenga un año y medio y hable a media voz, sino porque por los mordiscones que su perro le dio tiene que quedarse en casa haciendo reposo. Por supuesto que entiendo que su perro lo mordió porque se puso nervioso, eso está fuera de discusión. Yo sé lo que gasta usted en su perro y le creo que es lo más bueno del mundo, y que si revolcó al Mauri a los mordiscones es porque se sintió invadido en su espacio, que si bien es un espacio público, en ese momento era de él. Le correspondía, digamos, y como le dije, de haberlo visto, hubiera corrido al Mauri para otro lado. Si, total, la plaza es grande, qué necesidad de molestarlo. De verdad espero que el animalito esté más tranquilo ahora, no debe haber sido nada fácil calmarlo con lo furioso que estaba, quedan muy sobreexcitados, pobres. ¿Cómo se llama? Ah, Angelito, jaja, qué loco. Pobre Angelito, sin comerla ni beberla, el susto que se llevó con el Mauri... No, ellos quedan muy nerviosos después de darle esos revolcones a un gurí, porque en el fondo no les gusta, lo hacen por instinto. ¿Está un poco más tranquilo Angelito ahora? Bueno, me alegro. Me imagino que esta semana sale doble ración de pastillas, ¿no? Jaja, se lo merece, pobre Angelito.

Bueno, muchas gracias por entender y disculpas nuevamente, vecino. Y la verdad que, sin ánimo de molestarlo, cuando pueda y Angelito lo deje, si pueden alcanzarnos el bracito del Mauri se lo agradecemos pila, los médicos dicen que en una de esas capaz que sirve para la recuperación... No, tranquilo, entiendo perfectamente el daño psicológico que le haría ahora a Angelito sacárselo de al lado, me imagino que lo debe estar cuidando como todo un guardián. Sólo digo que en una de esas, si se aburre y encuentra otro juguete, que me avise y yo lo paso a buscar, a ver si se lo ponemos al Mauri y por lo menos le queda. Cuando crezca el Mauri, seguro va a entender todo. Bueno, le agradezco la amabilidad, saludos a Angelito y a toda la familia, vecino. A las órdenes y hasta la próxima. Que pasen lindo.