Las elecciones nacionales en el departamento de Maldonado estuvieron pautadas durante el día por una temprana afluencia de votantes a los circuitos: al mediodía había sufragado el 60% del padrón. Esto quizás se haya debido a la efervescencia electoral, acompañada por un domingo soleado, evaluaron casi todos los referentes partidarios consultados por la prensa en los circuitos donde les tocó votar.

Tras el cierre de las mesas de votación, dirigentes, candidatos y militantes se concentraron en sus respectivas sedes centrales para aguardar los primeros resultados del escrutinio. Los primeros en festejar resultados, cerca de la hora 22.00, cuando apenas había finalizado el escrutinio en un puñado de circuitos y el Partido Nacional (PN) triplicaba en votos al Frente Amplio (FA), fueron los militantes del sector nacionalista que lidera Enrique Antía.

“El trabajo de todos ustedes valió la pena. En Maldonado es un triunfo colectivo, tómenlo como propio y disfrútenlo”, dijo el intendente, entre vítores y música. “Es un festejo sobrio, tranquilo y sereno, porque falta el balotaje, aunque sabía que íbamos a votar bien en Maldonado. Nada de exitismo: hay que razonar para refrendar los resultados de este domingo. Hemos logrado seguir adelante y no dar un paso atrás”, había declarado minutos antes a la emisora FM Gente.

En la Casa del Frente Amplio, donde dirigentes, candidatos y militantes fueron concentrándose pasadas las 20.30, reinaban las emociones encontradas. Si bien cerca de las 22.00 estaba prácticamente asegurado que el diputado Eduardo Antonini (lista 609) había salido reelecto, este manifestó a la diaria que era prematuro expresarse u ofrecer evaluaciones sobre los resultados. Algunos referentes manifestaron que mantenían la esperanza de recuperar la segunda banca, pero el ambiente estaba cargado de expectativa y cautela en cuanto a celebraciones.

Diego Echeverría.

Diego Echeverría.

Foto: Natalia Ayala

La presidenta del FA departamental, Silvana Amoroso, manifestó a este medio su confianza en que la fuerza política logre mayoría parlamentaria. “Me hace acordar a 2015, cuando nos fuimos a dormir desanimados y al día siguiente tuvimos mayoría. Estoy contenta, y todavía queda mucho trabajo por hacer”, concluyó. Bastante más alegre había transcurrido el día para los frenteamplistas, cuya militancia se hizo notar en San Carlos y Maldonado con una multitud de jóvenes enfervorizados.

Calles a pleno sol y algarabía

Entre selfis y abrazos con sus acólitos, con altos niveles de ansiedad pero también de tranquilidad por el trabajo desplegado en la campaña, la mayoría de los dirigentes y candidatos de todos los partidos a la diputación por Maldonado sufragó a primera hora de la tarde. En general, agradecieron a su militancia y se mostraron satisfechos con el trabajo realizado durante la campaña.

Desde tempranas horas fue caótico el tránsito en el casco céntrico de Maldonado, con embotellamientos que obligaron a los conductores a detenerse largos minutos o avanzar a paso de peatón. Nada extraño, si se considera que las dificultades para estacionar son un problema cotidiano y que aproximadamente el 80% del padrón de 153.520 personas habilitadas se concentró en la capital departamental.

Eduardo Antonini.

Eduardo Antonini.

Foto: Natalia Ayala

La nota del día la dio el sanitario Martín Núñez, quien llegó a votar a una escuela céntrica de Maldonado a bordo de un antiguo charré tirado por un caballo llamado Compañero. El hombre, oriundo de Punta Ballena, contó a la diaria que se trasladó desde La Capuera en un viaje que le llevó dos horas y que, habitualmente, utiliza el pintoresco vehículo para participar en desfiles tradicionales y desplazarse por las ciudades.

En cuanto a la tarea en los circuitos, el jefe de la Oficina Electoral de Maldonado, Pablo Braganca, declaró que todo transcurrió con normalidad y que tuvieron que convocar muy pocos suplentes para trabajar en las mesas. Por otra parte, aunque destacó la accesibilidad de la mayoría de los circuitos, no faltaron personas en situación de discapacidad motriz que tuvieron dificultades para acceder a la mesa de votación y que no ocultaron su descontento por ese hecho. En los cuartos secretos no se registraron dificultades, más allá de las que implicó el despliegue de 97 hojas de votación.