La inestabilidad y la incertidumbre siguen siendo las sensaciones que dominan la realidad política y social de Venezuela, que está viviendo un momento de extrema tensión luego de las elecciones presidenciales realizadas el 28 de julio, en las que, si bien el Consejo Nacional Electoral dio como ganador al presidente Nicolás Maduro con el 52% de los votos para un tercer mandato de seis años, no presentó las actas correspondientes con el detalle del escrutinio en cada circuito de votación.

Esto reforzó la idea de que en los comicios hubo serias irregularidades, lo que motivó una reacción de la oposición, que se viene movilizando y este sábado llevó adelante manifestaciones en decenas de ciudades de Venezuela y también en muchos lugares del exterior donde viven migrantes venezolanos.

En el acto celebrado en Caracas, la líder opositora María Corina Machado dijo que “la gesta cívica más grande de la historia” del país la hizo el antichavismo a través del abanderado de la Plataforma Unitaria Democrática (PUD), Edmundo González Urrutia, y advirtió que las manifestaciones no cesarán. “¡No vamos a dejar las calles!”, expresó Machado, de acuerdo a lo que consignó la Deutsche Welle.

“Creyeron que, a punta de persecución contra nuestros testigos, no íbamos a conseguir nuestras actas y en 24 horas teníamos las actas digitalizadas”, agregó la dirigente de 56 años, que reivindicó la victoria de González Urrutia ante Maduro.

La oposición asegura que reunió, a través de testigos y miembros de mesa de las votaciones, el “83,5%” de las actas que fueron subidas a una página web, donde cualquier ciudadano puede hacer la comprobación del resultado con su número de cédula. Machado anunció, durante su discurso con el que se cerró la movilización en Caracas, una “quinta etapa” que consiste en “cobrar” la victoria de González Urrutia y que “cada voto se respete”.

Durante la semana, tanto Machado como Maduro rechazaron la idea planteada por Brasil, de resolver la situación en Venezuela con la realización de nuevas elecciones, ya que ambos entienden que el pueblo ya se expidió y los dos se están proclamando ganadores de la contienda.

El sábado, en Caracas, también hubo una movilización de seguidores del oficialismo que recorrió varias partes de la ciudad y finalizó con un discurso de Maduro en la casa de gobierno de Miraflores.

Allí, el mandatario acusó a la líder opositora María Corina Machado de tener un “pacto satánico” con el dueño de la red social X, Elon Musk, y con “la iglesia satánica” de Estados Unidos.

“Miren, compatriotas: nosotros estamos enfrentados a unos demonios. Cuando lo digo, no estoy exagerando. Ellos tienen un pacto satánico con la iglesia satánica de Estados Unidos”, dijo Maduro.

Refiriéndose a Machado, Maduro agregó: “La Sayona se pone un medallón y unas cosas raras porque tiene un pacto con Elon Musk y la iglesia satánica de Detroit”. La Sayona es un personaje fantasmal femenino perteneciente a la tradición rural venezolana.

Pero Maduro no sólo apuntó contra Machado, sino también contra Edmundo González Urrutia, a quien llamó en varias ocasiones “inmundo”. Sobre él, el jerarca chavista dijo que está “preparando su fuga de Venezuela”.

“¿Ganó? Será que se ganó una rifa para esconderse en una cueva. Anda metido en una cueva. Y está preparando su fuga de Venezuela. Edmundo González Urrutia se lleva los billetes y se va pa’ Miami”, dijo Maduro, según lo que recogió la revista colombiana Semana.

“¡No seas cobarde!”, exclamó el presidente refiriéndose a González Urrutia, sobre quien, al igual que sobre Machado, las autoridades abrieron una investigación por “instigación a la rebelión”, entre otros cargos.

Maduro pidió que ambos líderes opositores sean encarcelados por ser los responsables de los actos de violencia que se registraron luego de las elecciones, que costaron la vida de más de 20 personas. Aunque aún no hay órdenes de captura, González Urrutia está en la clandestinidad y no hizo ninguna aparición pública desde el 30 de julio.