El juez federal de la ciudad de Ushuaia, Federico Calvete llamó a indagatoria a 18 militares denunciados en el marco de la causa en la que se investigan las torturas cometidas por miembros de las Fuerzas Armadas contra soldados conscriptos durante la Guerra de Malvinas, ocurrida en el año 1982. La convocatoria del magistrado se produce a once años de iniciada la causa y a 36 de la finalización del conflicto bélico, pese a que se trata de hechos pasibles de ser tipificados como crímenes de lesa humanidad, según informó el portal Tiempo Argentino.

“El llamado a prestar declaración indagatoria constituye un verdadero punto de inflexión. Por primera vez en más de una década, los denunciados estarán frente a frente con el juez y se les expondrán los delitos de los que los acusa”, señaló Jerónimo Guerrero Iraola, abogado del Centro de Ex Combatientes de La Plata (Cecim), querellante en el expediente.

Las denuncias apuntan a torturas como los estaqueamientos, picaneamientos y enterramientos en la turba durante un tiempo. Al pedir la indagatotria, el fiscal de la causa, Marcelo Rapoport consignó que los militares sancionaban con esas torturas faltas como robar comida o dormirse durante la guardia. Al inicio de la causa se denunciaron 105 casos de torturas de soldados y unos ochenta hechos delictivos cometidos por noventa militares de las Fuerzas Armadas a los que acusaron por por homicidios, abandono seguido de muerte, tortura, vejámenes, coacciones, amenazas, lesiones graves, lesiones leves y abuso de autoridad. A pesar de que la Corte Suprema ratificó la decisión de instancias judiciales anteriores sobre la prescriptibilidad de los delitos, la investigación persiste luego de que se presentaran nuevas denuncias y la Cámara de Comodoro Rivadavia decidiera dar curso a la calificación de delitos de lesa humanidad, según informó Página12.