En 2015 el referente de la ultraderecha francesa Jean-Marie Le Pen fue condenado por una ley que penaliza el negacionismo del Holocausto. Había dicho que las cámaras de gas del nazismo no fueron más que “un detalle” de la Segunda Guerra Mundial. La ley que se le aplicó a Le Pen, conocida como Ley Gayssot y aprobada en 1990, también penaliza otras manifestaciones de odio. Por sus dichos, además, el dirigente fue expulsado del Frente Nacional, el partido que él mismo había fundado.

El jueves, durante su visita a Francia, militantes por los derechos humanos le pidieron al presidente argentino, Alberto Fernández, que evalúe la posibilidad de crear una ley similar en su país, en este caso para quienes nieguen los crímenes de la dictadura. “La idea es que la norma francesa pueda usarse de base para debatir un proyecto para adaptarlo a la situación en Argentina. El presidente nos pidió colaboración para elaborar un informe”, dijo a la agencia de noticias estatal Télam Sophie Thonon, abogada que representó a víctimas francesas de la dictadura y también al Estado argentino.

En respuesta, Fernández “se comprometió a elaborar una ley similar”, dijo Thonon. Agregó que la propuesta consiste en tomar como base esa norma francesa y crear un proyecto adaptado a Argentina. “El presidente nos pidió colaboración para elaborar un informe”, agregó.

Según informó Página 12, otra participante en el encuentro en París, María Laura Stirnemam, integrante de la organización HIJOS, manifestó: “El presidente fue muy sensible con nuestras inquietudes y nos dijo que estas cuestiones entrarían en su agenda”.