El ministro de Economía de Brasil, Paulo Guedes, puso como excusa su pasado como profesor universitario para intentar justificar sus palabras acerca de las trabajadoras domésticas. Había dicho que como consecuencia del bajo precio del dólar, hasta ellas “podían ir a Disney [World]”, con lo que generó una catarata de reacciones adversas.

Este viernes, durante una reunión con empresarios del Grupo GRI, que reúne a representantes de los sectores inmobiliarios y de la construcción, Guedes dijo que no pretendió ofender a nadie, y agregó que durante muchos años se desempeñó como profesor universitario y que al dar clases suele dar ejemplos para dejar en claro sus dichos.

Pero más allá de justificarse –algo que hizo durante el encuentro, según informaron a la prensa asistentes al acto–, el centro del discurso de Guedes ante los empresarios fue su conocida defensa de la privatización de las empresas públicas, uno de los principales estandartes de su política económica. El ministro insistió en que es necesaria la privatización de Eletrobrás, responsable de la generación y distribución de la energía eléctrica, y por otra parte afirmó que los royalties que el estado de Río de Janeiro recibirá por la producción de petróleo y gas natural harán que la economía de este estado se recupere rápidamente en los próximos cinco años.

Guedes también remarcó la importancia de que pueda llevarse adelante otra de sus políticas, la reforma tributaria, pero de acuerdo con los participantes, en la reunión se excusó de hacer referencia a la reforma administrativa. El jerarca de la administración Bolsonaro no habló con la prensa, ya que entró y salió por el garaje del hotel donde se realizó el encuentro.