Desde hace cuatro años Un Solo Uruguay (USU) hace un acto anual en Durazno, pero en esta oportunidad los autoconvocados optaron por una transmisión vía redes sociales, por la pandemia generada por la covid-19.
“A esta altura nadie puede dudar sobre qué habla el movimiento”, leyó uno de los integrantes de USU. “2020 fue una año de muchas propuestas”, dijo, y relató que entregaron al gobierno presidido por Luis Lacalle Pou un documento con variadas propuestas que iban desde aportes a la ley de urgente consideración, pasando por medidas para atender la covid, hasta la situación de seguridad.
Desde USU aseguraron que esa propuestas estaban pensadas para generar fuentes de trabajo: “Somos conscientes de lo que generó la pandemia y reconocemos las acciones del gobierno” para ayudar a las familias que no cumplan con sus necesidades básicas, pero “no nos podemos olvidar que los problemas en la actividad y en el empleo son anteriores a marzo de 2020, donde se perdieron algo más de 60.000 puestos laborales desde 2014 hasta el comienzo de la pandemia, donde desaparecieron miles de empresas, básicamente pymes en todos los sectores de la economía, y eso por una sola razón: El alto costo del Estado”.
“Perdimos la oportunidad de eliminar organismos burocráticos y reducir cargos políticos en distintos estamentos”, dijo, y agregó: “En definitiva, perdimos la oportunidad de empezar en el camino de hacer una seria y profunda reforma del Estado”.
Las “circunstancias adversas ocasionadas por la pandemia obligaron a sectores enteros de la economía a bajar sus cortinas […]. Sin embargo, los que tienen la vaca atada siguieron ajenos a las dificultades, e inclusive vimos con gran expectativa una reducción del abultado salario de los jerarcas de las diferentes dependencias estatales, una muestra de comprensión y solidaridad, que sólo duró dos meses”.
USU dijo que “conceptualmente” jamás van a estar de acuerdo con la renta básica, porque los que la proponen “armaron el circo para que la plata no llegue a quien más la necesita y quede básicamente en sueldos, beneficios de funcionarios y funcionamiento. Era de esperar, por la política definida por el actual gobierno de que estos indicadores mejorasen durante 2020, pero eso recién lo sabremos en la próxima Rendición de Cuentas”.
“Las intendencias” no escapan a la burocracia, “donde en muchas de ellas la superpoblación de funcionarios, jerarcas y cargos de confianza se tragan la mayor parte de lo recaudado, incrementando permanentemente los impuestos, las tasas y las patentes, destinando algunas apenas un 10% de lo percibido”.
“Capítulo aparte sería la patente única, la mayor injusticia social inventada por un gobierno que habló hasta el hartazgo de la igualdad y avalada por el Congreso de Intendentes, organismo creado para excusarse ante los vecinos de las desigualdades, la inoperancia y el incremento constante de tributos”, dice la proclama.
“Esta combinación, sumada a cientos de millones de dólares pagados en aranceles y junto a los altos costos internos, nos hace perder competitividad, responsabilidad 100% estatal, lo cual hace que las empresas exportadoras de bienes y servicios que generan el ingreso de divisas no puedan competir en el exterior, y esto resiente la generación de puestos de trabajo”, aseguraron desde el movimiento.
Sobre el final confirmaron las postulaciones al Banco de Previsión Social (BPS): “Para Un Solo Uruguay es un salto importante, es un cambio en la forma de trabajo, un cambio necesario, un cambio del decir al hacer, del proponer al gestionar […]. Queremos ser los gestores de la reforma que se viene en Seguridad Social”.
Los candidatos serán: José Pereyra por los empresarios, Luis Lisboa por los trabajadores y Virgina Vaz por los jubilados.