El ejército israelí bombardeó este sábado un edificio de más de diez pisos en Gaza en el que se encontraban las oficinas del canal televisivo catarí Al Jazeera y la agencia de noticias estadounidense Associated Press (AP), indicaron periodistas de esos medios de comunicación, que evacuaron el lugar antes del ataque.

“Estamos conmocionados y horrorizados por el hecho de que el Ejército israelí apunte y destruya el edificio que alberga la oficina de AP y otros medios de comunicación en Gaza”, dijo el jefe de la agencia, Gary Pruitt, en un comunicado. “Conocen desde hace tiempo la ubicación de nuestra oficina y sabían que había periodistas en su interior”, añadió, y dijo que les avisaron que el edificio sería alcanzado por un misil. “Se trata de un acontecimiento increíblemente inquietante”, señaló.

Una decena de trabajadores se encontraban en el edificio, pero todos se salvaron porque fueron evacuados a tiempo. “El mundo estará menos informado de lo que ocurre en Gaza por lo que ha ocurrido hoy”, lamentó. Pruitt dijo que pidieron explicaciones al gobierno de Israel y están en contacto con el Departamento de Estado de Estados Unidos para saber las causas del ataque.

Por su parte, la cadena de televisión Al Jazeera confirmó en redes sociales que sus oficinas estaban en este edificio y transmitió videos que muestran cómo la estructura se viene abajo y queda reducida a escombros.

“Trabajo aquí desde hace 11 años. Cubrí muchos eventos desde este edificio, hemos vivido experiencias personales y profesionales. Ahora todo simplemente se desvaneció en dos segundos”, escribió en un tuit Safwat al Kahlout, periodista de Al Jazeera.

Jawad Mehdi, propietario del edificio derribado, la Torre Jala, dijo que un oficial de inteligencia israelí le advirtió antes del ataque que tenían una hora para evacuar el edificio.

La Casa Blanca dijo que le transmitió a Israel que es “crucial” garantizar la seguridad de los periodistas. “Le hemos comunicado directamente a los israelíes que es una responsabilidad crucial cuidar la seguridad de los periodistas y medios independientes”, dijo en Twitter Jen Psaki, vocero del gobierno estadounidense.

El Ejército israelí, por su parte, justificó la ofensiva al señalar que en la torre había equipo militar perteneciente a Hamas, el movimiento islamista que gobierna Gaza. Según informó Efe, un portavoz militar israelí dijo que Hamás eligió ese edificio para almacenar su equipamiento debido a la presencia de medios de comunicación, que son “utilizados como escudos humanos”.

En la mañana del sábado las Fuerzas Armadas de Israel comunicaron que alcanzaron “docenas” de objetivos durante los bombardeos durante la noche del viernes. Diez personas de la familia Abu Hatab, ocho niños y dos mujeres, murieron en el campamento de refugiados de Al Shati al desplomarse el edificio de tres pisos donde vivían.

Más temprano, Hamas había lanzado múltiples cohetes contra Tel Aviv. La mayoría de ellos fueron interceptados; uno impactó en la cercana Ramat Gan, donde un hombre de 55 años murió y 13 personas resultaron heridas.

Desde el lunes pasado, Gaza es blanco de los bombardeos israelíes y desde la Franja de Gaza se dispararon mas de 2.000 cohetes en dirección a Israel, la mitad de ellos interceptados por el sistema antimisiles israelí Cúpula de Hierro.

El último balance de las autoridades palestinas calcula que hubo 140 muertos, entre ellos 40 niños, y 1.050 heridos en los bombardeos contra Gaza. En el lado israelí, hay hasta ahora diez muertos y más de 560 heridos.

Biden dialogó con Netanyahu y Abbas

Esto sucede al tiempo que el subsecretario de Estado adjunto para Israel y Asuntos Palestinos de Estados Unidos, Hady Amro, se encuentra en Tel Aviv. Amro viajó el viernes por la noche para “trabajar hacia una calma duradera, reconociendo el derecho de Israel a la autodefensa”, según informó la Embajada de Estados Unidos en Jerusalén en Twitter.

En ese marco, este sábado el presidente de Estados Unidos, Joe Biden, dialogó con el primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, y por primera vez con el presidente palestino, Mahmud Abbas, según informó _fe.

Según la agencia, portavoces del primer ministro israelí informaron que Netanyahu “agradeció al presidente el apoyo incondicional de Estados Unidos” al derecho de Israel a defenderse y enfatizó que su ejército “está haciendo todo lo posible para evitar dañar a los no involucrados”. Por su parte, en el diálogo con Abbas, Biden “dijo estar trabajando para calmar la situación”, según explicaron voceros del presidente palestino.

ONU pidió investigación por uso de munición real por parte de fuerzas de seguridad israelíes

En tanto, la alta comisionada de la ONU para los derechos humanos, Michelle Bachelet, dijo este sábado que su oficina ha recibido reportes del uso de munición real por parte de las fuerzas de seguridad israelíes, que resultaron este viernes en diez palestinos muertos durante protestas en Cisjordania, lo que podría considerarse un crimen de guerra.

“Armas de fuego sólo pueden ser utilizadas contra personas que representan una amenaza inminente de muerte o de heridas graves, y sólo en última instancia”, sostuvo Bachelet en una declaración. “En una situación de ocupación, el uso injustificado e ilegal de armas de fuego por parte de las fuerzas del orden puede constituir un crimen de guerra”, precisó, según informó Efe.

Bachelet pidió una investigación independiente y completa en torno a estas denuncias.

Asimismo, exhortó al gobierno de Israel a apaciguar el brote de violencia entre israelíes ultraortodoxos, muchos de ellos colonos, y palestinos con la nacionalidad israelí y que residen en Jerusalén y otras ciudades. “Es particularmente alarmante el aparente nivel de organización de algunos de estos ataques, así como del uso de un lenguaje que incita a la violencia y al odio racial y religioso”, recalcó la alta comisionada.

“En Gaza se han registrado intensos bombardeos israelíes, incluso desde tierra y mar, y preocupa que algunos ataques de las fuerzas israelíes se han dirigido contra objetivos civiles que, bajo el derecho internacional, no pueden ser considerados blancos militares”, dijo.

También denunció ataques perpetrados por algunos ciudadanos palestinos de Israel, y recalcó que el disparo de cohetes por parte de grupos armados palestinos en Israel, incluidas áreas densamente pobladas, es una clara violación del derecho internacional y representa también crímenes de guerra.