El presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, desafió este sábado una vez más la pandemia e, ignorando las prohibiciones locales de aglomeración, encabezó en San Pablo una multitudinaria caravana de motociclistas, informó la agencia Efe.

Bolsonaro participó en la caravana convocada por sus partidarios y grupos evangélicos y, sin usar tapabocas, lideró el gigantesco desfile de miles de motociclistas que se concentraron en las afueras del sambódromo de Anhembí, en la capital de San Pablo.

“Por la libertad, por la democracia y ¡acelera para Dios!”, fueron las palabras que dijo Bolsonaro al iniciar la marcha. Antes de participar en la caravana, saludó y se tomó fotos con personas que se aglomeraron en la avenida Olavo Fontoura.

La llamada “Moticada Acelera para Cristo” forma parte de una serie de caravanas de motociclistas simpatizantes del gobernante y esta vez reunió también a los grupos evangélicos de la tradicional Marcha para Jesús, un evento callejero multitudinario.

Como consecuencia de esta manifestación, Bolsonaro fue multado por no respetar las medidas sanitarias contra la pandemia y no usar tapabocas. Autoridades de San Pablo informaron que también fueron sancionados el hijo del presidente y el ministro de Infraestructura, Tarcísio Gomes.

“Cualquiera que esté en contra de eso no cree en la ciencia. No hay forma de que una persona vacunada pueda transmitir el virus”, dijo el presidente brasileño. El gobernador de San Pablo, João Doria, había advertido que Bolsonaro sería multado si no respetaba las normas estatales.