Este año se instalaron 112 radares en rutas nacionales para controlar la velocidad y empezaron a funcionar el 20 de noviembre, según informó el ministro de Transporte y Obras Públicas, José Luis Falero, ante la Comisión de Transporte de la Cámara de Representantes.
De acuerdo a la versión taquigráfica de la reunión, se estima que lo recaudado a partir de las multas por exceso de velocidad se ubica entre los 35 y 40 millones de dólares anuales.
Sin embargo, a pesar de esta estimación, Falero indicó que, debido a que los radares empezaron a funcionar hace poco, todavía no tienen un número que permita “tener la certeza” del monto que podría llegar a percibir el gobierno por las infracciones de velocidad.
Según se acordó en la última Rendición de Cuentas, 70% de lo recaudado por las multas se utilizará para el financiamiento de obras de infraestructura vial y 20% será para la Universidad Tecnológica (UTEC), con el objetivo de impulsar “el crecimiento de la oferta educativa en el interior del país”. El máximo de fondos recaudados para este destino será de 100 millones de pesos anuales, es decir, alrededor de 2,6 millones de dólares. De existir un sobrante al terminar el año, irá a la Corporación Nacional para el Desarrollo.
Tal como informó el ministro en la comisión, el 10% restante se destinará al Ministerio del Interior para que adquiera equipamiento de seguridad y mejoras tecnológicas. La mitad de este fondo y con un tope de 80 millones de pesos se utilizará para el servicio de atención sanitaria en rutas.
A su vez, por única vez, se destinarán 20 millones de pesos para adquirir un resonador magnético para el Hospital Veterinario.
Préstamo con Fonplata
Falero informó que el dinero que se recaude de las multas de velocidad es “garantía” ante el banco Fonplata por un préstamo de 300 millones de dólares otorgado a la Corporación Nacional para el Desarrollo, que permitió “cubrir algunos desfases” que se dieron como consecuencia del aumento de obras, “fundamentalmente por el aumento del asfalto que provocó un desbalance en lo planificado”.
“Debíamos optar por detener, enlentecer o parar obras, o por buscar un financiamiento extra”, explicó el ministro sobre la necesidad de solicitar el préstamo. “En caso de no cubrir la cuota”, dado que es un préstamo a pagar en diez años y al no saber con exactitud la recaudación a partir de los radares, el Ministerio de Economía y Finanzas se haría garante del saldo a pagar.
El ministro destacó que Fonplata realizó estudios a partir de datos de “otros organismos y gobiernos departamentales”, que arrojaron que hay un infractor cada 150 vehículos. En ese sentido, Falero planteó que “puede ser un número acertado de acuerdo al volumen de tránsito” que tienen las rutas uruguayas.
“Ojalá bajen [las infracciones] y la gente cumpla con la reglamentación de tránsito; eso es lo que todos deseamos”, expresó. “Más allá de que pueda ir disminuyendo la cantidad de infracciones, siempre tenemos infractores contumaces que están dispuestos a pagar la infracción y no cumplir con la reglamentación de tránsito”.