Realizar el Concurso Oficial de Carnaval en pandemia implica flexibilizar la normativa de participación, que establece mínimos de componentes en el escenario y respeto estricto de las flechas establecidas.
La Intendencia de Montevideo (IM) y Directores Asociados de Espectáculos Carnavalescos Populares de Uruguay (Daecpu), coorganizadores del evento, elaboraron un protocolo de actuación ante casos de covid-19 que funciona como anexo del reglamento del concurso.
De acuerdo con la disposición oficial, los conjuntos que tengan hasta 25% del plantel certificado por covid-19 deberán actuar en la fecha prevista. Para cubrir esas vacantes se habilitó la posibilidad de inscribir suplentes hasta las 17.00 del mismo día del espectáculo. Además, se eliminaron las penalizaciones de puntaje para las agrupaciones que no alcancen el mínimo de componentes establecido en el reglamento.
Jorge Lombardo, asesor de salud de Daecpu, explicó a la diaria que la certificación abarca a las personas que tienen diagnóstico positivo y a las que deben hacer cuarentena, ya sea por síntomas o por haber sido contacto de un caso positivo y no estar vacunadas, ya que el nuevo protocolo del Ministerio de Salud Pública (MSP) explicita que “si sos contacto directo, no tenés síntomas y tenés las tres vacunas no tenés que aislarte”.
Si más de 25% de su plantel está afectado por covid-19 en la primera o la segunda rueda, los conjuntos pueden actuar en la fecha pactada en las mismas condiciones mencionadas para el caso anterior, reprogramar o no actuar, según las circunstancias.
Pueden cambiar de fecha los conjuntos programados originalmente entre las etapas 1 y 5. Este es el caso de la murga Amables Vecinos, que fue la primera en modificar el fixture, porque tiene ocho casos de covid-19 activos en este momento, de acuerdo con el dato que brindaron a la diaria.
La situación es diferente para las agrupaciones de las etapas 6 a 11. Si eligen no subir pueden, cancelar su actuación en esa rueda. Lombardo afirmó que esta decisión se tomó calculando con cuántos días cuentan para modificar el fixture.
Si el conjunto no sube en la primera rueda, se le duplicará el puntaje de la segunda, y viceversa.
En el caso de la Liguilla, los conjuntos deberán actuar en la fecha prevista sin importar el porcentaje de personas certificadas por covid-19. Por la extensión de esta rueda, la reprogramación no es posible, asegura el protocolo. Además, como el sistema de puntaje es diferente al de las ruedas anteriores, el jurado no podrá duplicar los puntos, es decir que quienes no suban al Teatro de Verano en la Liguilla no sumarán puntos.
Control sanitario
Lombardo lidera el equipo que se encarga de realizar el control sanitario de los conjuntos. En caso de síntomas, es a ellos a quienes deben contactar las agrupaciones. “Inmediatamente los mandamos a hisopar, me avisan qué da el hisopado y si es positivo, los llama una médica para hacer seguimiento”, relató. Todo este proceso es financiado por Daecpu.
Este protocolo “lleva a no tener que estar esperando tres o cuatro días por el prestador de salud”, aseguró Lombardo, “nosotros vamos y los hisopamos con los test rápidos”. La médica, cuya identidad está protegida para preservar su labor, trabaja a distancia con los casos positivos, calcula e informa sobre la fecha de alta probable.
Lombardo es el nexo entre los conjuntos y la organización. Es él quien informa si una agrupación está en condiciones de subir al Teatro de Verano en la fecha prevista. A partir de allí, es responsabilidad de Daecpu y la IM gestionar qué sucede en cada caso.