En ocho capítulos está distribuido un curso de nutrición, explica Emanuelle Miranda, productor de la serie documental Cocinar con el libro, ganadora de un fondo de fomento de la Dirección del Cine y el Audiovisual Nacional, que primero emitió Tevé Ciudad y desde el jueves puede verse semanalmente a las 21.00 por TNU.
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Para “alinear conceptos”, en un principio, diseñaron el proyecto con la Guía alimentaria para la población uruguaya, lanzada en 2016 por el Ministerio de Salud Pública, como referencia y pensaron en dedicar cada capítulo de 45 minutos a un recetario.
Estuvieron ocho meses en preproducción, incorporaron a la nutricionista Florencia Guerra y en setiembre de 2017 sucedió el rodaje. Habían convencido a Gustavo Hernández (La casa muda, 2010) de que se encargara de la dirección, aunque él nunca se había involucrado con producciones sobre gastronomía. Penélope tampoco había conducido; estaban nivelados.
Consiguieron como set un complejo en José Ignacio y acordaron con Hernández, que estaba en España ocupado en No dormirás, que interrumpiera la filmación para venirse unos días a dirigir sobre alimentación saludable. “Era una locura, teníamos que coordinar todo en 10-12 días”, recuerda Penélope. Lo dice porque el programa terminó estructurándose, además, en encuentros con los cocineros que escribieron esos libros, o con otros invitados que tuvieran relación con ellos (fue el caso de Fernando Trocca, por ejemplo, que no estaba disponible en esas fechas).
Pasaron por el ciclo, que quizás tenga una segunda temporada, la chef Leo Espinosa, de Colombia, la periodista gastronómica argentina Natalia Kiako, la productora agroecológica y representante de Slow Food en Uruguay Laura Rosano, el experto en cocina de origen amazónico Thiago Castanho, Aurelien Bondoux, de La Bourgogne (Punta del Este), Verá, un indígena guaraní, la presentadora de televisión brasileña Bella Gil, y Pilar Rodríguez, embajadora gastronómica de Chile. Fue algo así como poner a prueba el libro ante los convocados que llegaban a probar el plato, casi como excusa para conversar sobre esos menesteres. El ciclo, o mejor dicho, sus realizadores, fueron parte de las ferias paralelas al festival de Cannes el año pasado y se está en negociaciones para que se distribuya al exterior.