Ayer comenzó el III Festival Internacional San José Foto, en la capital maragata, que incluye talleres, exposiciones, visitas guiadas y una feria de fotolibros, y estará hasta mañana. La escuela de fotografía de Gato Peludo, que dirige Federico Ruiz Santesteban, participará por primera vez, con una propuesta que se caracteriza por un enfoque lúdico y se enmarca en la premisa del festival, que este año se centró en los vínculos, mediante el abordaje de un tipo particular de estos: los familiares.
Arrancaron ayer, en la Plaza de los Treinta y Tres Orientales, y estarán hoy y mañana. Presentarán cuatro propuestas: la primera es una muestra colectiva de revelados caseros, realizados por integrantes del taller; se trata de 31 piezas de 31 autores, ya que se puso énfasis en que la muestra incluyera a todos los que quisieran participar.
Santesteban dice sobre el revelado: “Nos parecía que lo mejor era materializar la imagen por nuestros propios medios y utilizamos una técnica que tiene varias vertientes: una técnica original de Gato Peludo, inspirada en las técnicas históricas de la goma bicromatada y el cianotipo, pero con modificaciones en la fórmula para evitar efectos nocivos”.
Las tres muestras restantes se caracterizan por su carácter interactivo, “para jugar y participar”: Ballena genealógica, de Victoria Rodríguez; Las familias Mara-Gato Peludo, de colectivo dieciocho:quince, integrado por Agustín Cibils, Melina Mota, Pablo Núñez y Roberta Rodrigues; y Familia al cubo, de Juan Porcile.
“En el ámbito de la fotografía contemporánea se constata que hay una superabundancia de imágenes, y las visiones más apocalípticas plantean que ya no hay que sacar más, porque ya se sacó todo. Queríamos enfocarnos en el género más utilizado, el álbum familiar, desde la convicción de que todavía hay muchas cosas para contar, a pesar de esa superabundancia de imágenes: más allá de esa superabundancia, muchas veces el registro familiar termina acotado a algunos momentos excepcionales y felices de la vida”, explica Ruiz.
En el caso de Ballena genealógica, la autora, además de exponer, coordinará un taller de fotocollages para todo público, que tendrá lugar hoy entre las 10.00 y las 17.00: los interesados están invitados a llevar fotos de su álbum familiar, que serán copiadas e impresas, y servirán de insumo para reinterpretarlas mediante diversas técnicas. “Es una reformulación del álbum familiar de la autora partir del fotocollage y de una serie de relatos de su abuela sobre su familia, que tienen un tinte fantástico impresionante y que la llevaron a revisar desde otro lugar ese registro de imágenes”, contó Ruiz.
Las familias Mara-Gato Peludo es un ensayo fotográfico que desarrolló el colectivo dieciocho: quince a partir de definir “familia” como un conjunto de personas que se consideran unidas por tener características, ideas o intereses comunes. “Los integrantes del colectivo viajaron a San José desde la primavera hasta ahora, hicieron cuatro o cinco viajes. El objetivo fue documentar familias que no se correspondieran con la definición tradicional de familia; así surgieron la familia del bar, la familia que se encuentra a jugar a las cartas, la familia de la peluquería, la familia vinculada a la iglesia, etcétera. Se transformará en un juego de encontrar los pares, va a ser una propuesta interactiva en la que las personas de San José podrán encontrarse en esas fotos”, relata Ruiz.
Por último, Familia al cubo retrata a seis integrantes de una familia y lleva esas fotos a nueve cubos, lo que permite componer infinidad de rostros distintos, los “nuevos integrantes”, generados a partir de las diversas combinaciones posibles. Para Ruiz, “funciona como un tótem fotográfico en forma de cubo” mediante el cual se invita al juego y la reflexión acerca de los propios vínculos, a partir de las similitudes y diferencias entre los miembros de una familia.