Esto de convertir películas en series de televisión no es patrimonio de la nueva era de las plataformas y su necesidad voraz de renovar esa masa amorfa llamada contenido. Disney lo hizo con muchas de sus películas animadas, a veces en forma de precuela y a veces de secuela. Hasta podríamos hacer una subcategoría solamente con las series (animadas) inspiradas en películas protagonizadas por Jim Carrey y estrenadas en 1994: La máscara, Tonto y retonto, Ace Ventura, detective de mascotas.
Así que no debería sorprender que Prime Video haya estrenado una serie acerca de una película que, sin ser de culto porque recaudó sus buenos millones de dólares, el tiempo fue olvidando. Sobre todo en países como el nuestro, donde el béisbol no es más que una compañía para esos hombres que los fines de semana pueden mirar absolutamente cualquier deporte del planeta. Incluyendo el golf.
En 1992 se estrenó A league of their own, traducida al español como Un equipo muy especial (en España fue Ellas dan el golpe). Estaba basada en la historia real del desarrollo en Estados Unidos de una liga femenina de béisbol durante la Segunda Guerra Mundial, cuando muchos de los hombres en buen estado atlético habían ido a combatir al teatro europeo. La película, dirigida por Penny Marshall, tenía como protagonistas a Geena Davis, Madonna, Lori Petty y Rosie O’Donnell como parte de los Rockford Peaches. Su entrenador fue interpretado por Tom Hanks.
Un año después llegaría la serie de televisión (vieron que ya se hacía), cancelada antes de que se emitiera su sexto episodio. Y este año, con el apoyo de una de las plataformas con el bolsillo más grande, llegaron ocho episodios que amplían aquel universo, se toman algunas libertades creativas y, sobre todo, le dan una diversidad que hace 30 años parecía impensada en un entretenimiento masivo.
La historia es la misma: la falta de hombres lleva a la creación de la All-American Girls Professional Baseball League, como ocurrió de verdad. Contemplamos la formación de los Rockford Peaches desde la llegada de las potenciales deportistas a las audiciones, la conformación del equipo y su desempeño en el campeonato. Pero también tendremos tiempo para que los personajes se desarrollen, interactúen, crezcan y también cometan errores.
Dos de los roles principales fueron para actrices conocidas en el mundo de la comedia televisiva: Abbi Jacobson fue una de las protagonistas de la maravillosa Broad City (que recomendaré en breve) y D’Arcy Carden es famosa por interpretar a Janet, la supercomputadora humanoide en The Good Place. Ellas son Carson y Max, respectivamente, dos de las jugadoras más destacadas del nuevo equipo y figuras de referencia entre sus compañeras.
Pero hay una tercera protagonista, que es la menos conocida Chanté Adams en el rol de Max. Es que A league of their own está construida en base a dos subtramas paralelas: por un lado, la liga de marras, con las dos mujeres al frente, y por el otro, la historia de Max como esa joven afroestadounidense que es rechazada del campeonato exclusivamente por motivos racistas y recorre un largo camino para intentar cumplir su sueño de jugar de manera profesional al béisbol.
La serie se construye sobre la idea de que en aquella época (y muchas veces hoy) las mujeres eran consideradas personas de segunda categoría, a las que hubo que recurrir porque no había otra opción. Esto en el mejor de los casos, ya que algunas de ellas son de tercera y hasta de cuarta categoría, debido al racismo rampante y a la condena a toda clase de sexualidad ajena a la norma. Todo esto no sólo está presente en la historia, sino que es parte fundamental de ella.
Comandando cada una de las mitades de la ficción tenemos a una mujer que intenta retomar el control de su vida más allá de los mandatos sociales y familiares. Con identidades sexuales en construcción y la presión de mantenerlas en secreto, irán descubriendo que el mundo es todavía más complejo e incluye personajes transexuales, guaridas en las que poder mostrarse como son y el peligro latente de que sus verdades lleguen a las personas incorrectas. Esto se pone de manifiesto en una de las escenas más lindas y a la vez desgarradoras de la serie, en donde la libertad se termina con el derribo de una puerta.
El valor de esta creación, desarrollada por Jacobson junto a Will Graham (quien estuvo detrás de Mozart in the Jungle), es combinar la opresión y los momentos desesperanzadores con mucho humor. El elenco, que incluye a la comediante Kate Berlant, sabe jugar con ese registro inocentón de los años 40, aunque en ningún momento busca el realismo en materia de diálogos. Las integrantes de los Peaches hablan en una suerte de versión neutra del inglés actual... y Carson tiene el mismo registro que Abbi Abrams en la mencionada e ineludible Broad City.
Más allá de los resultados deportivos, con Nick Offerman (Ron Swanson en Parks and Recreation) en el papel del entrenador, lo más interesante de A league of their own es presenciar los pequeños triunfos personales (y más de una derrota) de personas con vidas casi tan complejas como las reglas del béisbol.
A league of their own, protagonizada por Abbi Jacobson, D’Arcy Carden y Chanté Adams. Ocho episodios de alrededor de una hora. En Prime Video.