Los jardines de infantes
En la educación inicial no sólo se busca inculcar a los pequeños ideas como que a los tres años un ser humano ya tiene genitales. También hay un intento permanente por naturalizar las bases del colectivismo estalinista. Ordenar el salón todos juntos, jugar sin competir, compartir la merienda son sólo algunas de las herramientas adoctrinadoras de uso obligatorio en el sistema educativo. Frente a esto, las orejas de burro para el que no aprende, la posibilidad de exonerar el examen final de digitopintura por buenas calificaciones y los cursos de supervivencia en las sierras de Minas deben ser incluidos en los programas.
El carnaval de Melo
Mandar todos los años a Sergio Puglia y Orlando Petinatti es una buena medida para evitar la montevideanización ideologizante de esta festividad, pero no es suficiente. No olvidemos que Melo está en la frontera con Brasil, por lo que la naturalización del homosexualismo y el travestismo que caracterizan al país norteño permea en el carnaval arachán. Basta de mandar a los rambitos en miniatura, llegó el momento de que entren en combate los rambos de verdad: Mercedes Vigil, Guillermo Domenech y, si esto falla, Gustavo Salle.
La Universidad de Montevideo
No hay lugares a salvo de los embates gramscianos. Prueba de ello es que en la universidad del Opus Dei han venido desapareciendo materias como Historia de la Sagrada Inquisición, Autoflagelación Avanzada, y Economía, Fe, Prosperidad y Compromiso con el Capitalismo. Revertir esta degeneración espiritual no es tarea fácil, pero hasta el camino más largo comienza por el primer paso, que en este caso consiste en sacar todos los retratos de Francisco I, el papa comunista.
X es importante, por supuesto. Facebook también. Pero no olvidemos que el marxismo nació y se desarrolló mediante la contaminación de los espacios laborales. Si se quiere evitar que una persona se afilie a un sindicato ni bien consigue trabajo, hay que dejarle bien claro durante el período de búsqueda que los paros y las ocupaciones generan pérdida de la productividad, estancamiento en el desarrollo de la raza humana, hambre y destrucción, y que es extremadamente egoísta traer todas esas desgracias simplemente por pretender ganar más de 20.000 pesos.