De más y de menos

Recibir un regalo sorpresa en el Día del Padre de un hijo que no sabías que tenías.
Haber recargado la tarjeta STM el día antes de que asumiera Bergara y tener boletos baratos hasta la próxima suba.
Que Juan Salgado vaya a completar los 40 años de intendencias frenteamplistas siguiendo las ceremonias de asunción desde la misma silla.
Que el Club de Golf siga todavía más tranquilo que Juan Salgado.
Que te inviten a pasar un fin de semana en la embajada uruguaya en Buenos Aires.
Que los ediles blancos de Montevideo empiecen a tener sus reuniones de bancada en la terminal Tres Cruces.
La moda de prender fuego la avioneta que te llevó hasta la estancia de tus padres.
Que lo más planificado de los gobiernos sean las ceremonias de asunción.
Que te regalen un pijama dos talles más grande para que lo puedas usar el próximo invierno.
Que se te rompa un electrodoméstico y no te importe porque sos de Artigas y Vale dos Santos te va a regalar uno nuevo.
Confiar en que Antel va a comprar los derechos del fútbol uruguayo.
Firmar acuerdos comerciales medio pelo, pero que aun así sean más importantes que los que firmó el gobierno neoliberal que te precedió.
Bajar con un litro de cerveza el superalimento que recomendó consumir la Universidad de Harvard.

Que tu regalo para el Día del Padre sea un cedulón que te intima a ponerte al día con la pensión de tus hijos.
Los lentes de Zunino. Y todo el resto.
Llevar cuatro meses como vicepresidenta y que aún te persigan las cosas que hiciste en la Intendencia.
Que todos los intendentes asuman el mismo día. Es como prender todos los fuegos artificiales juntos.
Que en el conflicto de la pesca nadie explique cuál es la diferencia entre la pescadilla y la pescadilla de red.
Haber sacado un pasaje a Alemania en donde planeabas hacer un paseo por el Rin, maravillarte con la arquitectura de Berlín y participar en una cumbre de la ultraderecha, y no poder entrar porque a los zurdos de mierda se les ocurrió no poner el lugar de nacimiento en los pasaportes.
Que Punta del Este todavía no tenga un alcalde de La Libertad Avanza.
Que José Pedro Damiani no esté vivo para ver los tejemanejes que se arman con las Sociedades Anónimas Deportivas.
Seguir sin entender a qué carajos se dedica Wanda Nara.
Pasarte medio año escuchando a gente diciendo que son team verano y a la otra mitad diciendo que son team invierno.
Volver quemadito de Río de Janeiro y cruzarte con alguien que volvió más quemadito que vos del Caribe.
Que tu único hijo te regale un voucher para una prueba de ADN.