Una mujer de 31 años fue asesinada y su fue cuerpo hallado en un aserradero en las inmediaciones de Víctor Ruiz y Magalí Herrera, en el barrio Mandubí de la ciudad de Rivera.

La Policía se presentó en el aserradero sobre las 11.15 de este lunes, porque recibieron la alerta de que una persona estaba caída en el interior de una de las piezas del predio.

Una vez allí, según informó el Ministerio del Interior, los policías se entrevistaron con testigos que dijeron que al notar que esa pieza estaba trancada con candado fueron a mirar por la ventana y vieron a una mujer en el piso, por lo que llamaron al servicio de emergencias 911.

Con la autorización correspondiente, los policías ingresaron al lugar y constataron que había una mujer muerta y con signos de violencia. Trabajaron en el lugar la Policía Científica y la Dirección de Investigaciones de la Jefatura de Policía de Rivera. El caso está a cargo de la fiscal de Tercer Turno, Stella Alciaturi.

Fuentes policiales contaron que la mujer tenía una relación sexoafectiva con un hombre de 55 años, que tiene tres antecedentes penales, y trabajaba en el aserradero. Por el momento, se desconoce el paradero del hombre, pero está en calidad de indagado, por lo que si no aparece se estima que se librará una requisitoria.

En lo que va de 2021 hubo 25 femicidios, nueve más que en todo 2020

El primer femicidio de 2021 fue el de Carolina Escudero. Su expareja se suicidó luego de matarla y presentar una denuncia por su “desaparición”. Tenían un hijo de tres años.

El segundo femicidio fue en Cerro Largo. Un hombre asesinó a su pareja y luego se mató. Tenían un hijo de cinco años, que estaba en el lugar del hecho.

El tercer femicidio fue el de una mujer asesinada en la vía pública en la Unión por su pareja, que luego se suicidó. Tenían un hijo de cinco años.

El cuarto femicidio fue el de una mujer de 43 años que trabajaba como guardia de seguridad y fue asesinada por su expareja, de 45 años, en la vía pública en Sauce. El femicida, de 38 años, se suicidó después de matarla con un arma de fuego.

El quinto femicidio ocurrió en Casavalle. Una mujer de 31 años fue asesinada por su pareja, de 40 años, en la casa que compartían. El hombre intentó matarse, pero no pudo y se entregó a la Policía horas después.

El sexto femicidio fue en Tacuarembó, donde un hombre de 89 años apuñaló en su casa a una mujer de 29 años y luego se suicidó.

El séptimo femicidio también ocurrió en Tacuarembó: una mujer de 60 años fue asesinada por su pareja, de 66 años, que luego se quitó la vida.

El octavo femicidio fue en Malvín Norte, en Montevideo. Una mujer de 37 años fue apuñalada por su pareja, de 34 años, que fue quien alertó a la Policía y se entregó luego del ataque.

El noveno femicidio ocurrió en Cerro Largo. Una mujer fue prendida fuego y falleció tras semanas de agonía. Antes de perder la conciencia acusó a su pareja, un estanciero, que fue liberado por falta de pruebas.

El décimo femicidio fue en Young, Río Negro, donde una mujer fue asesinada por su expareja, que intentó suicidarse después.

El undécimo femicidio fue el de Soraya Castro, de 51 años, en Ciudad de la Costa, Canelones. La mujer recibió un impacto de bala en la cabeza el 30 de junio. Su pareja, de 62 años, fue imputado por homicidio muy especialmente agravado por femicidio, después de plantear distintas versiones sobre lo que había sucedido.

El duodécimo femicidio fue el de Eliana Fernández, de 18 años, asesinada por su expareja el 30 de junio en Tacuarembó, en presencia de la hija de ambos, de seis meses. El femicida, de 22 años, tenía una orden de restricción de acercamiento, después de que ella lo denunció ante la Justicia por violencia doméstica en mayo. No tenía tobillera electrónica. Tras atacarla, intentó suicidarse. Fue detenido e imputado por homicidio muy especialmente agravado por femicidio.

El decimotercer femicidio fue en Artigas. Yamila Soledad Macuso, de 38 años, fue asesinada por su pareja. Días antes la mujer había solicitado que le retiraran la custodia que tenía para protegerla de su agresor. El femicida, Astrugildo Saldaña, de 49 años, permaneció semanas prófugo. Cuando lo encontró la Policía, se mató.

El decimocuarto femicidio fue en Paysandú. Una adolescente de 16 años fue asesinada por su exnovio, de 21 años, que se suicidó después de matarla. Se habían separado ese día.

El decimoquinto femicidio fue protagonizado por un adolescente de 17 años que mató a puñaladas a su novia de 18 años en Paysandú. Fue privado de libertad en el Instituto Nacional de Inclusión Social Adolescente y la Fiscalía pidió la pena máxima para adolescentes: diez años.

El decimosexto caso fue en Tacuarembó. Se investiga si una mujer que murió a causa de quemaduras se suicidó o fue un femicidio.

El decimoséptimo femicidio.Una mujer fue asesinada mediante asfixia y su cuerpo fue trasladado al Parque Artigas de la ciudad de Pando, en Canelones. La encontraron dos días después de que tras una discusión vieron al hombre salir de la casa que compartían con bolsas de gran tamaño.

El decimoctavo femicidio fue en San Carlos. Una mujer de 19 años fue asesinada en su casa a golpes en la cabeza con un adoquín. El femicida huyó del lugar en moto y tuvo un accidente: chocó contra un auto que estaba estacionado. Fue internado en grave estado internado con custodia policial. La mujer es madre de un bebé de 8 meses.

El decimonoveno femicidio ocurrió en Paysandú. Una mujer fue asesinada por su nieto a puñaladas en su casa. El hombre, de 24 años, fue imputado.

El vigésimo femicidio fue en Malvín Norte, en Montevideo. Una mujer de 43 años fue asesinada en su casa.

El vigésimo primer femicidio fue en Sauce, Canelones. Una mujer de 42 años fue asesinada por un hombre, de 38 años, que después de matarla se mató.

El vigésimo segundo femicidio fue en Sayago, Montevideo. Una mujer de 29 años fue asesinada a puñaladas por su pareja de 43 años. El hecho ocurrió en presencia de la hija de ambos, de 8 años.

El vigésimo tercer femicidio fue en Salto. Una mujer de 19 años que había sido denunciada como desaparecida fue encontrada enterrada en el fondo de la casa que compartía con su pareja.

El vigésimo cuarto femicidio fue en Paysandú. Un hombre de 82 años mató a su pareja, de 60 años, en la casa que compartían y se suicidó.

Por otro lado, en este período, se registraron al menos nueve tentativas de femicidio: en Treinta y Tres, en Río Negro, en Cerro Largo, en Artigas y dos en Canelones –en Barros Blancos, en Santa Lucía, en Carmelo, en Mercedes y en Montevideo.